Vecinos de Sevilla deciden quién okupa un piso en su edificio y el chico provoca un incendio

  • Nadie ha revisado el edificio para saber si es peligroso vivir tras el incendio

  • El okupa tenía enganchada la luz al piso de sus padres, que viven en el mismo edificio

Se incendia un piso propiedad del banco en un barrio de Sevilla, los vecinos decidieron meter al hijo de unos vecinos para evitar que okuparan otras personas que le dieran más problemas. El chico enganchó su luz al piso de sus padres y esto hizo que se produjese el incendio, las llamas podían verde desde la calle y la casa ha quedado totalmente devastada, pero no solo eso, ha afectado a la vecina de al lado y a las zonas comunes y el banco se lava las manos.

Vanesa, la vecina de al lado, no puede volver a su casa, se ha quedado en la calle, ella tenido que volver a casa de sus padres y su pareja está viviendo en casas de amigos y por ello, ‘El programa del verano’ ha hablado en directo con ella para que cuente la situación por la que está pasando y para enseñarnos en el mal estado en el que han quedado ambas viviendas. Ha explicado que no les dan soluciones: “Nada, ninguna. El propietario de mi piso me ha dicho que el banco se lava las manos, se echan la pelota uno a otro y aquí no viene nadie, yo necesito que me limpien, el olor es insoportable, aquí no se puede estar”. Confirma que nadie ha revisado el edificio: “No se explicar cómo aquí no ha venido nadie, para decir si puedo estar aquí, si el muro se va a caer… Apagaron el incendio, todo el mundo se fue y nadie dijo nada".

Sobre que eligieron a la persona que okupaba la casa incendiada: “Han venido varias familias conflictivas y los vecinos decidieron que viniera este muchacho que no da problemas, pero yo lo que sé es que si esa casa hubiera estado vacía a mi no me hubiera pasado esto”. Sobre cómo se enteran del incendio: “Me llamó mi madre diciéndome: “Tu casa se quema” imagínate la situación”. Sobre la solución que tienen: “Tengo entendido que el banco se tiene que hacer cargo y pagarme los desperfectos, me dicen que van a mandar a gente, pero aquí no aparece nadie”.