Raquel Contreras, dueña del restaurante donde trabajaba 'el rey del cachopo' cuenta que el hostelero tenía un currículum brillante. Sin embargo, asegura que no era muy buen cocinero pero como le caía bien no le despidió. Cuando Cesar Román terminaba su jornada laboral, se iba a tomar cervezas sin ningún tipo de preocupación. Al verlo en 'El Programa de Ana Rosa', Raquel llamó a la policía. Como le indicaron que actuara con normalidad incluso llegó a presionarle para que trabajara más rápido.