Fiestas casi todos los días y destrozos en el portal: los vecinos están desesperados con el piso en el que entró la policía
Los vecinos confirman que vive un joven estudiante extranjero: "Hace fiesta tras fiesta tras fiesta..."
Antes del suceso: "El jueves estaban varios con la música a tope, el viernes se repitió y llegó la Policía Municipal y Nacional que no consiguieron nada"
"El sábado pasó lo que sabemos, la intervención duró cuatro horas y la policía intentó de muchas maneras mediar con ellos"
La escena de un grupo de policías tirando la puerta abajo de un domicilio ha sido vista por toda España. Los agentes actúan ante una fiesta ilegal producida en un estado de alarma, algo que se repetía durante varios días y que los vecinos confirman a 'El programa de Ana Rosa'.
El apartamento en el que actuaron los agentes está alquilado por un joven estudiante extranjero. Los vecinos son muy claros, confirmando las constantes fiestas en el interior del domicilio y que los agentes intentaron buscar todo tipo de soluciones antes de realizar la brusca intervención.
Los vecinos no pueden más: fiestas casi todos los días
Jueves, viernes, sábado. Fiesta tras fiesta. Así viven los vecinos del piso en el que los policías tiraron la puerta abajo con un ariete, los que viven en el bloque dejan claro a reportero que "no es la primera fiesta que realizan".
Una vecina describe los tres días de fiesta en el famoso apartamento: "El jueves había muchísimo ruido, con varios amigos dentro, poniendo la música a tope, no podíamos dormir... El viernes se repitió la situación, llegó la Policía Municipal y luego la Nacional que no consiguieron nada y el sábado pasó lo que todos sabemos...".
Una de las personas que vive en el mismo bloque que el joven extranjero detalla: "La intervención acabó sobre las cinco de la mañana y la policía llegó sobre la una". Es decir, alrededor de cuatro horas estuvieron los agentes negociando con los individuos que realizaban una fiesta durante la pandemia.
"La policía intentó de muchas maneras mediar con ellos, explicándole sus derechos y lo que les iba a pasar si no abrían la puerta. Fue un proceso muy largo en el que la policía buscó todas las vías posibles", dice una de las vecinas.
El portal, destrozado diariamente tras las fiestas del apartamento
El calvario de los vecinos no acabe en el interminable ruido nocturno, también sufren diariamente cómo los inquilinos y sus invitados destrozan y ensucian el mobiliario del portal. Papeles, servilletas, suciedad, muchos desperfectos... así amanece el lugar común que disfrutan todos los habitantes del edificio.
La vecina explica que han agotado todas las vías y están realmente cansados: "Intentamos hablar con él en repetidas ocasiones para poder convivir y estar tranquilos, pero no surtió efecto y han sido fiestas tras fiestas tras fiestas...".
Carmen, que vive dos plantas por encima, explica resignada que la noche del sábado "temblaba todo" debido a la música. Además, la mujer detalla que "eso era a gritos, yo creo que debían estar unas 20 personas dentro".
