Los policías que liberaron a la menor secuestrada en Carabanchel: “Ella nos dice que la intención de él era cortarla en trozos"

Los policías que liberaron a la menor secuestrada en Carabanchel: “Ella nos dice que la intención de él era cortarla y tirarla a un contendedor”
El testimonio de los policías que encontraron a la menor secuestrada en Carabanchel.
  • Al detenido se le imputan delitos de secuestro y amenazas

  • La joven estaba retenida en un sótano de Carabanchel y atada de la cabeza a los pies con cinta americana

  • En el local había una sierra de 40 centímetros, una maza y un cuchillo grande

Compartir

La policía liberó el pasado miércoles a una chica de 15 años que estaba secuestrada en un sótano de Carabanchel. Los agentes la encontraron atada de la cabeza a los pies con cuerdas, cable eléctrico y cinta americana. Consiguieron reducir al presunto agresor y liberar a la joven, que llevaba varias horas retenida.

‘El programa del verano’ ha hablado en directo con dos de los agentes que liberaron a la joven y detuvieron a su presunto atacante. “Cuando llegamos, el autor estaba encima de ella. Procedemos a reducirle y cuando conseguimos liberarla de las ataduras ella nos dice que la intención de este caballero es cortarla en trozos y tirarla a un contenedor”, explica uno de los policías. Además, añade que a los pies del agresor había “una sierra de 40 centímetros, una maza y un cuchillo grande”.

PUEDE INTERESARTE

Según explican los agentes, el presunto agresor no se dio cuenta de que los policías habían accedido al sótano en el que se encontraban porque tenía la música muy alta, supuestamente para que no se escucharan los gritos de la joven. “Nosotros nos tiramos encima y le tiramos al suelo, no le dio tiempo a reaccionar”, explican.

La búsqueda de la chica

Fue la propia joven la que, durante un momento que logró liberarse las manos, llamó a la policía para pedir auxilio. La dirección que dio era errónea y los agentes estuvieron 45 minutos buscándola hasta que dieron con ella. A encontrarla ayudó que algunos de los policías tuvieron una intervención con el presunto agresor hace unos meses y vieron que las características del local que les había dado la chica coincidían con el lugar en el que habían estado. “Nos costó encontrarlos porque la puerta que daba al sótano estaba escondida en un mostrador”, relatan.

Al detenido se le imputan delitos de secuestro y amenazas, a falta de lo que cataloguen la fiscalía y el juez del caso.