Pedro Sánchez visitó Barcelona para visitar a los policías heridos durante los disturbios en la ciudad condal. Durante esta visita, el presidente en funciones contó con un despliegue de seguridad. Uno de los hombres de su equipo de seguridad portaba un maletín, el cual puede ser desplegado en unos segundos y posee la misma función que un chaleco antibalas, el cual puede utilizarse para proteger a una persona o a varias personas. Además, durante su salida, se pudo ver como uno de los vehículos de seguridad del presidente, uno de sus hombres portaba un subfusil. Un despliegue de seguridad que hasta ahora no se había observado en ningún presidente.