Familia Real Británica

Un libro retrata el lado más íntimo del príncipe Andrés: orgías, su amistad con Epstein y su "matrimonio abierto" con Sarah Ferguson

El príncipe Andrés
El príncipe Andrés. Cordon Press
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"El príncipe Andrés era una presa fácil para una serpiente cascabel como Jeffrey Epstein". Con esta frase, el historiador británico Andrew Lownie retrata al duque de York en su nuevo libro, 'Entitled: The Rise and Fall of the House of York', una biografía que vuelve a sacudir los cimientos de Buckingham Palace y coloca de nuevo al hermano del rey Carlos III en el epicentro de la polémica.

A escasos días de su publicación oficial, algunos extractos ya han sido adelantados por medios británicos e internacionales, revelando acusaciones tan explosivas como conexiones con redes de inteligencia, orgías, disputas familiares y un comportamiento dentro de la Casa Real que muchos han considerado irreconciliable con su posición.

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El príncipe Andrés

Su amistad con Epstein y orgías

Lownie sostiene que el duque de York fue manipulado por Epstein, quien supuestamente vendió sus "secretos más íntimos" a servicios de inteligencia extranjeros como el Mossad, agencias saudíes e incluso libias. Según el autor, el magnate y delincuente sexual habría grabado o recopilado información comprometida sobre Andrés y otros rostros conocidos, que luego ofrecía a cambio de favores o protección.

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Según el diario 'The Times', varias fuentes de inteligencia consultadas por Lownie confirmarían estas actividades, aunque muchas pruebas no han sido divulgadas por motivos de seguridad o privacidad.

Más allá de los temas geopolíticos, el libro detalla el lado más íntimo del príncipe Andrés. Lownie recoge testimonios de mujeres que aseguran que el duque presumía abiertamente de tener un "matrimonio abierto" con Sarah Ferguson, a quien le habría sido infiel en contadas ocasiones.

"Quería que tuviera relaciones sexuales atrevidas. No tenía límites. Me dijo que tenía un matrimonio abierto con su esposa", recoge 'Hindustan Times'.

El príncipe Andrés en una imagen de archivo.

Esta situación, según el libro, le habría permitido mantener relaciones extramatrimoniales de forma habitual, algunas de ellas con la presencia o el conocimiento de Epstein. También se describe la participación de Andrés en fiestas sexuales organizadas por el financiero estadounidense, donde habría asistido a "orgías" con presencia de modelos jóvenes.

La biografía también detalla que Epstein se refirió a sí mismo y a Andrés como "adictos sexuales en serie", diciendo: "Según los informes que he recibido de las mujeres que hemos compartido, es el animal más pervertido en la cama. Le gusta participar en cosas que incluso a mí me resultan pervertidas, ¡y yo soy el rey del fetichismo!", añade el citado medio.

Lownie asevera que Andrés estaba "consumido por el sexo" y que durante una estancia de fin de semana en Bangkok, Andrés habría exigido que enviaran a más de 40 mujeres a su habitación de hotel. "A menudo, en cuanto una se iba, llegaba otra", cuenta una fuente en el libro.

Sarah Ferguson

Pese a todo, Lownie alega que la duquesa gastó millones de libras en personal real, en alquilar villas en el extranjero, exigir seguridad para sus dos hijas, Eugenia y Beatriz, y en gastos personales. "La joven pelirroja fue vista inicialmente como un soplo de aire fresco cuando se casó con él en 1986, pero la explotación de su estatus real para ganar dinero la ha visto, junto con su exmarido, como una figura muy poco querida", traslada 'The Mirror'.

Según el autor, Fergie se hizo conocida por acumular enormes facturas en tiendas como Harrods e irse sin pagar. "También encontró maneras de sortear sus limitaciones financieras. Estas cuentas nunca se pagan, por alguna razón. Las tiendas no se quejan por quién es ella, o nunca lo hacían".

El príncipe Andrés y Sarah Ferguson

Su presunta disputa con el príncipe Harry

Uno de los episodios más impactantes que recoge 'Entitled' es una supuesta pelea física entre el príncipe Andrés y su sobrino, el príncipe Harry, en 2013. El enfrentamiento habría estallado tras un comentario de Andrés sobre Meghan Markle, lo que habría provocado una reacción violenta de Harry, dejando a su tío con la nariz sangrando.

Esta versión ha sido categóricamente desmentida por el propio Harry. Su portavoz calificó la historia de "falsa y difamatoria", asegurando que nunca hubo tal altercado. Incluso se ha enviado una carta legal a los medios que publicaron el extracto, incluyendo 'The Daily Mail', exigiendo una rectificación inmediata. Varios expertos en la familia real coinciden en que esta es una de las afirmaciones más difíciles de sostener, aunque el autor insiste en el libro haber consultado fuentes cercanas a los Windsor.

Su trato con el personal de Buckingham

El libro también pinta un retrato poco favorable del carácter de Andrés dentro de Buckingham. Lownie recupera numerosos testimonios que lo describen como autoritario y "maleducado" con los empleados del palacio.

Cuenta cómo en 2005, en el castillo de Hillsborough, el príncipe insultó a un miembro del personal que confundió el tratamiento correcto hacia la reina madre: "¿Y aún no sabes cómo referirte correctamente -reina Isabel, la reina madre? ¿¡Tú maldito imbécil!? ¡Sal de aquí!", habría espetado.

Este tipo de comportamiento, según el libro, era habitual y generaba miedo entre quienes debían servirle.

Un príncipe caído en desgracia

El historiador dedica buena parte de su investigación a explicar cómo el príncipe Andrés ha ido perdiendo todo su capital político y simbólico desde su entrevista en Newsnight en 2019, donde habló sobre su relación con Epstein. Desde entonces, fue apartado de los actos públicos, perdió sus títulos militares honorarios y fue despojado de su papel como representante oficial de la Corona.

El príncipe Andrés

El libro describe una situación familiar tensa, especialmente con el rey Carlos III y el príncipe Guillermo, quienes estarían presionando para que Andrés y Sarah Ferguson abandonen el Royal Lodge, la lujosa residencia en Windsor que ocupan a pesar de que ya no cuentan con asignación pública.

Con una reputación dañada, sin funciones oficiales y alejado del círculo de confianza de la corona, Lownie lo retrata como una figura solitaria, incómoda y sin futuro en la monarquía británica.

A pocos días de su publicación, el libro se presenta como una de las biografías más explosivas sobre un miembro de la familia real británica. Con afirmaciones que combinan espionaje, escándalos sexuales, disputas familiares y abusos de poder, el libro promete reabrir heridas dentro de Buckingham y alimentar el debate sobre el verdadero papel del príncipe Andrés en el futuro de la monarquía.