¿Qué bebida vegetal puedo elegir para sustituir la leche vaca?
Hay personas que no quieren o no pueden beber leche de vaca y recurren a las bebidas vegetales en su lugar
Pero no todas son iguales y depende de lo que busques te va a convenir más una u otra
La etiqueta y la información nutricional nos pueden dar pistas de cuál llevarnos a casa
Hace tiempo que las bebidas vegetales se han hecho un importante hueco. Para darnos cuenta solo tenemos que darnos una vuelta por cualquier supermercado. Donde hace años había tan solo bebida de soja hoy podemos encontrar una enorme variedad: de coco, de avena, de almendras, de arroz… La lista es interminable.
Esto abre un abanico enorme donde poder elegir, pero también nos complica un poco la vida, porque hay tantas opciones que muchas veces no sabemos en qué basarnos para quedarnos con la opción que más nos conviene.
¿Qué uso le queremos dar a la bebida vegetal?
Lo primero que debemos plantearnos a la hora de optar por una bebida de este tipo es el fin que le queremos dar o el motivo por el que la elegimos. Es decir, cuáles son nuestras prioridades. Por ejemplo, ¿queremos utilizarla simplemente para consumir de vez en cuando y en poca cantidad, como cuando añadimos un poco al café, o bien, pretendemos utilizarla en sustitución de la leche para consumir en cantidades considerables y conseguir un aporte nutricional parecido?
Si nos quedamos con la primera opción, quizá lo que más nos interese es elegir simplemente la bebida vegetal que más nos guste por su sabor, dado que consumida de forma ocasional y en pequeña cantidad no va a tener una repercusión significativa sobre nuestra dieta.
Ahora bien, si nuestra idea es la segunda opción, es decir, si queremos conseguir un aporte nutricional similar al de la leche de vaca, o al menos, una bebida tenga una composición interesante, conviene tener en cuenta algunas consideraciones.
Es importante leer la etiqueta
Como ocurre con cualquier otro alimento, a la hora de elegir es fundamental leer la etiqueta para conocer sus características y poder tomar una decisión más informada y consciente.
Lo primero y más importante que deberíamos consultar es la lista de ingredientes. Resulta evidente que en ella se enumeran los elementos que componen el producto, pero también debemos saber que estos deben mostrarse en orden, según su importancia, de modo que el que se indica en primer lugar es el más abundante y el que ocupa la última posición es el que se encuentra en menor proporción.
Así, si en un producto vemos por ejemplo que el azúcar se encuentra en una de las primeras posiciones, es muy probable que se trate de una bebida poco interesante desde el punto de vista nutricional.
También conviene saber que en esa lista debe indicarse la proporción concreta de los ingredientes que se destacan de algún modo en el envase. Por ejemplo, si se trata de una bebida de almendras, es muy probable que este fruto se cite en la denominación de venta o que en el envase se muestre una imagen, así que debe indicarse obligatoriamente su cantidad.
En este caso, si consultamos esa lista de ingredientes, es posible que nos llevemos una desagradable sorpresa porque probablemente la proporción de almendra será muy escasa, de apenas el 3%. Es decir, puede que nos encontremos ante una bebida elaborada básicamente con agua, azúcar y el equivalente a tres almendras por cada litro, con lo cual no resultará precisamente muy interesante desde el punto de vista nutricional o comercial.
Así pues, si queremos un aporte nutricional significativo, convendría elegir una bebida donde el ingrediente que le da nombre (por ejemplo, almendra, soja, etc.), se encuentre en una proporción considerable.
La información nutricional nos puede ayudar a decidir
Además de la lista de ingredientes, es importante consultar la información nutricional, que nos sirve como complemento para hacernos una idea de las características del producto. Por ejemplo, uno de los aspectos que conviene consultar es la cantidad de azúcares. También es interesante conocer la cantidad de proteínas y de grasas. Para hacernos una idea, la leche entera de vaca contiene un 3,6% de grasas y un 3,2% de proteínas, aproximadamente.
La bebida de soja sería la mejor opción
Si lo que buscamos es una bebida que tenga un aporte de nutrientes parecido a la leche de vaca, la mejor opción sería la leche de soja, dado que aporta una cantidad similar de proteínas (unos 7 gramos por vaso) y además estas son de buena calidad nutricional (están compuestas por aminoácidos esenciales). Lo ideal sería que no tuviera azúcares añadidos y que estuviera enriquecida con calcio y vitaminas (por ejemplo, A, D, E, B).
En cualquier caso, es importante tener claro que la leche de vaca y las bebidas vegetales no son equiparables (tampoco la de soja). Se trata de productos diferentes y aunque la composición cuantitativa pueda ser parecida (por ejemplo, un 3,5% de proteínas en ambos casos), la composición cualitativa es completamente diferente (por ejemplo, la composición de esas proteínas es distinta).
Suscríbete a la newsletter de Gastro y te contamos las noticias en tu mail.