Palabra de arquitecto: tres aciertos y tres errores a la hora de unir la cocina al salón

Unir la cocina al salón puede ofrecer numerosos beneficios, como mayor amplitud visual y un ambiente más sociable y comunicativo
Esta integración puede convertirse en una mejora importante para cualquier hogar, creando un espacio tan funcional como atractivo
El concepto de unir la cocina al salón ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente para lugares que pretenden ser espacios modernos y contemporáneos. Sin embargo, este tipo de diseño tiene tanto ventajas como desventajas, siendo crucial entenderlas antes de emprender una reforma. Hemos hablado con Enrique Ibañéz, director y fundador en el estudio de arquitectura Urban Matters, para que nos dé tres aciertos fáciles y tres errores comunes en la integración de estos espacios a la hora de plantear este tipo de cocina.
Tres aciertos fáciles a la hora de unir la cocina al salón
Optimización de la ventilación y extracción de humos
Uno de los aciertos más importante al diseñar una cocina abierta es la instalación de un sistema de extracción de humos de alta calidad. Esto no solo ayuda a mantener el aire limpio y libre de olores, sino que también previene que los olores de la cocina se propaguen por todo el salón. Una campana extractora potente y bien instalada es fundamental para garantizar que el ambiente se mantenga fresco y agradable.
Además, hay que recordar que tener en cuenta la circulación de aire en general es crucial. La ubicación de ventanas y el uso de ventiladores de techo pueden complementar el sistema de extracción, asegurando un flujo de aire constante que evite la acumulación de olores.
Uso estratégico del mobiliario para definir espacios
La utilización de muebles multifuncionales y su disposición estratégica puede ayudar a definir visualmente las diferentes áreas dentro de un diseño de planta abierta. Por ejemplo, una isla de cocina puede servir como una barrera natural entre la cocina y el salón, proporcionando almacenamiento adicional y espacio para cocinar, mientras que también actúa como un punto focal del diseño.
Además, el uso de alfombras, iluminación focalizada y diferentes materiales en el suelo pueden contribuir a la demarcación de los espacios sin necesidad de levantar muros. Esto mantiene la amplitud visual y la cohesión estética.
Incorporación de materiales y tecnologías sostenibles
Elegir materiales sostenibles y tecnologías inteligentes no solo mejora la eficiencia energética del hogar, sino que también aporta una estética moderna y ecológica. Materiales reciclados para encimeras, iluminación LED y electrodomésticos de bajo consumo son ejemplos de cómo se puede hacer una cocina abierta más sostenible y eficiente.
El uso de materiales como la madera certificada y pinturas ecológicas puede contribuir a un entorno más saludable y respetuoso con el medio ambiente.
Tres errores habituales a la hora de unir la cocina al salón
No tener en cuenta la acústica
Un error común al diseñar una cocina abierta es no tener en cuenta el impacto acústico. Los electrodomésticos ruidosos, como las campanas extractoras y las lavadoras, pueden ser especialmente molestos en un espacio abierto. Es fundamental elegir electrodomésticos con niveles de ruido bajos y considerar la implementación de soluciones acústicas, como paneles insonorizantes o alfombras gruesas.
La disposición de los electrodomésticos y la utilización de materiales que absorben el sonido pueden ayudar a mitigar el ruido. Invertir en electrodomésticos que operen por debajo de 50 dBA es una buena práctica para mantener un ambiente tranquilo.
Ignorar las necesidades de almacenamiento
Al eliminar paredes y tabiques, se pierde un valioso espacio de almacenamiento. Es crucial diseñar soluciones de almacenamiento eficientes que permitan mantener el orden y la funcionalidad. Estanterías integradas, armarios de piso a techo y muebles multifuncionales pueden ofrecer el almacenamiento necesario sin comprometer el diseño abierto.
Es recomendable aprovechar las islas de cocina y los muebles con almacenamiento oculto puede maximizar el espacio disponible. Mantener las encimeras despejadas y bien organizadas es esencial para evitar una apariencia desordenada.
Subestimar la planificación de la distribución
Una planificación deficiente de la distribución de la cocina y el salón puede resultar en un espacio poco funcional y estéticamente desagradable. Es esencial asegurarse de que la disposición permita un flujo natural y que todas las instalaciones necesarias, como electricidad, agua y gas, estén adecuadamente distribuidas. La correcta distribución no solo afecta la funcionalidad, sino también la seguridad y la eficiencia del espacio.
Se debe pensar en la ergonomía de la disposición de los muebles y electrodomésticos, ya que puede mejorar significativamente la experiencia del usuario. Un diseño que minimice los recorridos y optimice la accesibilidad a los elementos esenciales es clave para una cocina abierta eficiente.
Unir la cocina al salón puede ofrecer numerosos beneficios, como mayor amplitud visual y un ambiente más sociable y comunicativo. Sin embargo, para que esta integración sea exitosa, es crucial abordar la planificación y el diseño con atención meticulosa a los detalles técnicos y estéticos. Evitar los errores comunes y aprovechar los aciertos destacados puede transformar esta integración en una mejora significativa para cualquier hogar, creando un espacio unificado que es tanto funcional como atractivo.