El restaurante de carretera favorito de Martín Berasategui para hacer una parada en los viajes largos
El reconocido chef español tiene un restaurante de carretera favorito a medio camino entre Madrid y el norte de España para comer buena carne
El restaurante de carretera más grande de España con más de 100 años de historia que fundó un camionero
Lo habrás escuchado más de una vez, si un restaurante está lleno o ves su parking abarrotado de coches, lo más probable es que ahí se coma bien, sobre todo si hablamos de establecimientos de carretera, esos salvavidas gastronómicos que son un oasis en medio de un viaje largo, como al que puede que te enfrentes ahora en plenas fiestas navideñas. Son muchos los restaurantes de carretera que existen a lo largo de los miles de kilómetros de asfalto de España, donde los camioneros son una gran referencia, pero también hay chefs que recomiendan los que, para ellos, son los mejores.
Así lo hace hasta el mismísimo Martín Berasategui, uno de los mejores chefs de la historia de España, que en alguna ocasión ha comentado cuál es su favorito, uno ideal si viajas desde el norte de España hacia la zona de Madrid o viceversa, normal que lo haya descubierto teniendo en cuenta que es de San Sebastián. Un lugar que ha conseguido conquistar su paladar y donde hace una parada cada vez que tiene oportunidad.
Se trata de un restaurante que se encuentra en la sierra norte de Madrid, en el pueblo de Buitrago de Lozoya, el restaurante Las Murallas (Plaza de la Constitución 3), un local del que Berasategui resalta la profesionalidad de su personal y, por supuesto, su gastronomía, sobre todo las carnes, que son su gran especialidad.
Qué comer en Las Murallas
“Cuidamos la tradición de nuestros platos, pero nunca sin dejar de descubrir nuevos caminos dentro de la gastronomía”, cuenta el restaurante en su página web sobre el tipo de cocina que hacen en sus fogones, ofreciendo una carta de cocina tradicional que se mezcla con platos típicos de la zona, recetas caseras con algo de historia, y siempre un toque de sofisticación en cada uno.
En cada una de sus recetas buscan el respeto por el producto, que siempre intentan que sea lo más próximo posible. Entre sus especialidades están los callos a la madrileña o sus asados en horno de leña que hacen por encargo, como el cordero lechal o el cochinillo, además de los chuletones de buey o de ternera, o su increíble cachopo de buey con cecina y queso de cabra.
Sin duda, un lugar perfecto para hacer una parada y darte un buen homenaje culinario en tu viaje en coche, especialmente ahora en pleno invierno, que con el frío apetecen platos más contundentes y esas carnes espectaculares cocinadas en horno de leña.