En medio de un tonteo durante la cena italiana, Marcelo bajó la guardia y se burló de la pericia como cocinera de Laura, a lo que ella ni corta ni perezosa le espetó: "Si hago las pizzas a tu lado me van a salir como el culo, simplemente por tener a una persona tan fea como tú al lado".
De nuevo salió el tema del físico, algo que, por lo visto, al narciso malagueño le toca muy hondo. Marce se levantó de la mesa indignado, asegurando que aquel comentario de la muchacha había tenido "malicia" y que se lo había dicho con cara de asco y "de oler mierda". Alucinda por la reacción, Laura le juró que era una broma, a lo que él la llamó "gorda", también de broma claro.
Y ya estaba la tragedia servida. Laura emepzó a gritar, a llorar y a patalear. "¡Si no quieres que yo te gaste bromas, tú tampoco las gastes. Cada vez que abro la boca, todo se lo digo con malicia!", gimoteaba la morena. Mientras tanto Marcelo, dolido en su orgullo y creyendo firmemente que le estaba vacilando, evitó el enfrentamiento, como él mismo dice, "". mordiéndose la lengua en más de una ocasión
¡Qué equivocado estaba Marcelo! Laura no le desprecia ni quiere vacilarle. En medio del berrinche, la parleña ha revelado en el confesionario sus verdaderos sentimientos hacia él: "Lo primero es que malicia no puedeo tener con él porque le quiero".
Marcelo no aguanta más
Marcelo, sin embargo, piensa de forma muy distinta. En su blog personal ha manifestado que no soporta a Laura y que la quiere fuera de la casa. En caso contrario, ya ha propuesto a la audiencia que le echen porque se quiere ir: "No aguanto más... La situación se ha vuelto totalmente inestable para mi. Laura cada día está peor y peor, y soy al único que ataca sin cesar... Estoy apunto de explotar, pero no lo haré (o al menos eso espero), y no por falta de ganas. Malos tiempos me esperan de aquí al jueves, y peores si resulta que Laura no esta definitivamente nominada como yo deseo".