La efectividad del radar covid, en entredicho: desde su inicio en País Vasco solo ha detectado 1 positivo

La aplicación 'Radar Covid' herramienta puesta en marcha por el Gobierno para reducir la incidencia de la actual pandemia de coronavirus, no está teniendo el éxito esperado. Los expertos señalan varios factores que están creando dificultades, entre ellos, la falta de concienciación ciudadana sobre el uso de esta aplicación.

En España, el desconocimiento de la población sobre el uso de tecnologías para cuestiones médicas es muy grande. Muchas personas no se instalan la aplicación porque creen que a través de ella pueden robarle algún tipo de dato personal, cuando es algo que se ha demostrado que no es cierto.

Además, la aplicación en sí también está teniendo problemas. Muchos usuarios aseguran que han tenido problemas para comunicar su positivo a través de la aplicación, ya que no tenían el código necesario para hacerlo, que tiene que ser proporcionado desde Salud. Otros también han tenido problemas en la app para recibir notificaciones sobre un posible contagio de contactos cercanos.

El claro ejemplo de todos estos fallos está en País Vasco, donde, como recoge Nius, desde la puesta en marcha de la aplicación solo se ha notificado a través de ella 1 positivo.

La 63 federaciones que forman parte de la Asociación del Deporte Español (ADESP) promoverán de forma conjunta la implantación de la aplicación 'Radar Covid', de cara a concienciar para extender su uso entre la sociedad española.

"Desde que ha comenzado esta pandemia, el deporte español ha demostrado que quiere ser parte de la solución, así que seguimos a disposición de la sociedad para que nuestro deporte se convierta en altavoz y ejemplo de buenas prácticas, pues la descarga masiva de 'Radar Covid' nos ayudará a disminuir el impacto de esta epidemia", señaló José Hidalgo, presidente de ADESP.

Esta aplicación tiene como objetivo ayudar a evitar la propagación del COVID entre la ciudadanía y funciona como herramienta en la detección de contagios por contactos estrechos, avisando de manera anónima del posible contacto que una persona haya podido tener con otra infectada a lo largo de los últimos catorce días. Se estima que, si el 20 por ciento de la población realiza su descarga, se conseguirá reducir el impacto de la pandemia en un 30 por ciento.