EEUU reserva 100 millones de dosis de la vacuna de Pfizer
El acuerdo de suministro firmado por el gobierno de Trump incluye una opción para la compra de otras 500 millones de dosis
Donald Trump se ha pasado meses negando la letalidad del Covid-19. Ahora empieza a entender que los 4 millones de contagios en EEUU no son un invento para manipular al pueblo norteamericano. Solo así se explica que su gobierno ya haya reservado 100 millones de dosis de la vacuna que desarrolla Pfizer con BioNTech.
"Today, my Administration reached a historic agreement with Pfizer, to produce and deliver 100 million doses of their vaccine immediately following its approval." pic.twitter.com/U5aVxYj41i
— The White House 45 Archived (@WhiteHouse45) 22 de julio de 2020
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El Gobierno de Estados Unidos ha informado este miércoles que pagará 1.950 millones de dólares a Pfizer y a la firma alemana BioNTech para que produzcan y suministren al país estas dosis. Además incluye la posibilidad de ampliar la cantidad hasta otras 500 millones de dosis en caso de ser necesario, según ha explicado el Departamento de Salud y Servicios Humanos y el Departamento de Defensa.
Pfizer Inc entregará las dosis si el producto recibe autorización para uso de emergencia o una licencia de la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos, después de haber demostrado la eficacia y seguridad de su vacuna en los ensayos clínicos exhaustivos de Fase 3.
Si todos estos condicionales se dan, la vacuna se distribuirá de forma gratuita a los ciudadanos estadounidenses, según el Gobierno de EEUU. El Financial Times ha adelantado que se prevé que la vacuna en desarrollo de BioNTech probablemente requerirá al menos dos dosis para ser efectiva, el coste por inmunización es de aproximadamente 40 dólares por persona, según el Financial Times.
Estados Unidos ha confirmado casi cuatro millones de casos en el país, incluidas casi 143.000 muertes. Estas cifras suponen un récord de muertes en un día a causa de la pandemia, 1.000 adicionales. Los datos de Covid-19 van en un aumento constante de nuevos casos de coronavirus, con estados como California, Arizona, Florida y Texas marcando cifras récord casi a diario.