Sandra, Isabel y Cristina, finalistas de 'I Love Escassi'

TELECINCO.ES 09/04/2010 00:53

Inma ha sido la última expulsada de 'I Love Escassi'. Y también se ha ido echando pestes sobre el protagonista del concurso. En esencia, le ha llamado falso y ha asegurado con el refrán 'Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces' que el jinete no es en absoluto una persona sincera. Además, ha sentenciado: "Soy mucho más mujer que él hombre, él sabrá lo que quiere tener".

Por lo demás, Sandra comenzó la semana anunciando sus intenciones con claridad: "paso de todas, sólo me interesa Álvaro". Y fue bien cierto. En una cena con los amigos del jinete, aprovechó para meterle un poco de mano por debajo de la mesa delante del resto de comensales lo que abrió la caja de los truenos.

En dicha cena, además, Cristina metió bulla preguntando "¿Álvaro alguna vez fue fiel?". A lo que una amiga del sevillano replicó: "ha tenido parejas a las que ha sido fiel, eso sí, Álvaro es muy claro: cuando acaba, acaba. Es fiel a sus sentimientos".

El problema es que las carantoñas con Sandra eran muy fuertes e Isabel rompió a llorar. Dijo de la situación que ella era "una hija de puta" y que con él no podía. Cristina la consoló diciéndole que no se merecía "ni una sola lágrima" de ellas. El caso es que al final de la cena Escassi dijo de Isabel: "No tengo claro lo que siento por ella, pero me atrae".

Más sorprendentes fueron las excusas que dio Álvaro para justificar sus juegos con Sandra: "He estado un poco pendiente de ella para que se sienta mejor y punto". Los motivos, que a juicio de Escassi Sandra es más frágil y necesita que se le haga más caso. Inma replicó airada: "Sandra no tiene modales".

El discurso de Escassi

Entonces, cuando Isabel seguía llorando, Escassi pronunció un discurso inmortal: "Aunque parezca mentira, y que nadie se ría, soy sensible. Soy una persona bastante sensible y soy quien soy por ser sensible, no por ser chulo. Fama no quiero más, tengo bastante, que no es nada agradable. Dinero, me encantaría vivir como vivo pero pudiendo. Con vosotras tengo muchísimo respeto".

De este desencuentro se pasó a otro mucho mayor en un tablao al que Álvaro se llevó a las chicas. Sandra había decidido no salir de marcha, pero luego se arrepintió, se puso muy mona y en el bar eclipsó a todas, que no pararon de meterse con la longitud de su falda e insultos bastante subidos de tono.