Lo que estáis viendo aparecer en vuestras pantallas no es una nave espacial, aunque lo parece. Se trata de la nueva arma de la marca de los cuatro aros para el mundial de resistencia y las 24 horas de Le Mans: el Audi R-18 e-tron.

Y ha llegado con alma de revolucionario pues apenas comparte elementos con su antecesor. El trabajo de los ingenieros de Ingolstad ha buscado hacer el mejor coche posible pero, a la vez, también el más eficiente.

En Audi han partido de una hoja en blanco para diseñarlo basándose en tres líneas de trabajo: una mayor eficiencia para el ahorro de combustible, un nuevo sistema híbrido de propulsión y cambios en el aspecto aerodinámico.

Con respecto al modelo que sustituye ha cambiado su frontal que ahora es más afilado, más alto y lleno de deflectores para canalizar el flujo de aire. Además, los faros ayudan a darle un aspecto agresivo con su forma de T tumbada.

Destacan sobremanera los enormes pasos de rueda delanteros que se alargan por el lateral hasta integrar los retrovisores. Por el contrario las ventanillas laterales son diminutas y también se ha recortado la chimenea superior de ventilación con respecto al modelo 2015.

La parte trasera recibe un difusor nuevo que es el culpable de gran parte de la carga aerodinámica de este Audi R-18 e-tron. Además diversas partes del motor han sido reubicadas para dejar sitio a diferentes deflectores para el aire.

También dispone de un chasis monocasco y está provisto de una mecánica que puede generar hasta 1.000 CV de potencia. Eso sí, seguirá apostando por el diésel y para ello montará un 4 Litros de 6 cilindros y bloque en v.

Pero además llevará un sistema de propulsión híbrido que utilizará un acumulador de iones de litio como tecnología de almacenamiento de energía. Está ubicado en el eje delantero y es capaz de aprovechar la fricción generada por el piloto al frenar para recargarse.

De esta manera el Audi R-18 e-tron consigue ser hasta un 32,4% más eficiente y consigue un consumo un 10% menor. Esto se traducirá en vueltas extras al circuito mientras sus rivales tengan que parar a repostar.

Después de ver el coche y conocer sus características no nos extrañan las palabras de Wolfgang Ullrich, responsable de Audi Motorsport: "el desafío para 2016 es volver a ganar, sin paliativos, aunque el reto está en hacerlo de una manera más eficiente".

La semana que viene os contaremos los secretos de sus dos grandes rivales: Toyota y Porsche.