Un matrimonio estadounidense agradece al pueblo de Granada que lo ayudó en el apagón: "Nunca lo vamos a olvidar"
Un matrimonio americano atrapado en un AVE agradece a Íllora, Granada, su ayuda durante el apagón
Las pérdidas de generación antes del apagón tuvieron lugar en Granada, Badajoz y Sevilla
GranadaTras la solidaridad que se vio durante el apagón del 28 de abril, hemos conocido diversidad de historias personales. Algunas relacionadas con viajeros que se quedaron tirados, como un matrimonio estadounidense que ahora agradece al pueblo de Granada que lo ayudó.
Mientras se sigue hablando de las causas del suceso eléctrico que tuvo impacto nacional, Jill Yager y William Dyer han enviado una emotiva carta manuscrita a las autoridades locales del municipio de Íllora.
En sus inmediaciones, concretamente junto a la pedanía de Tocón, el tren de AVE en el que iban montados ambos americanos se quedó detenido por el corte de electricidad que afectó a la línea ferroviaria.
Unas 238 personas, en total, tuvieron que ser evacuadas por agentes de la Policía Local y vecinos que colaboraron, después de cortar la valla de seguridad para acceder a la zona de las vías. "Vinieron a nuestro rescate", recuerda la pareja.
Entre los llevados al pabellón de una escuela en Íllora había "niños, embarazadas y ancianos", según destacó ese mismo lunes la Jefatura en un comunicado. "Dos conductores de autobuses Moreno aceptaron trasladar a los viajeros", añadió.
"Gracias por la amabilidad y generosidad"
Ya en el lugar donde fueron acogidos temporalmente, los vecinos de Tocón se volcaron en suministrarles a todos "comida, bebida, colchones y mantas" para que pudiesen pasar las siguientes horas lo mejor posible.
"Una muestra más del buen hacer de las gentes de nuestros pueblos y de todo el municipio", ha recalcado ahora la Policía Local de Íllora, quien ha compartido las palabras de agradecimiento que escribieron Jill Yager y William Dyer.
En ellas se dirigen directamente a los voluntarios de Protección Civil, agentes y vecinos que les prestaron su ayuda. "Gracias por la amabilidad y la generosidad. Para nosotros es una experiencia que nunca vamos a olvidar", admiten.
Recuerdan que al llegar al gimnasio, recibieron "sopa caliente, té, sándwiches, dulces y café" tanto para alimentarse como para entrar en calor. El matrimonio, residente en la población estadunidense de Asheville, Carolina del Norte, ha querido devolver el detalle con su escrito a mano.