¿Por qué las protestas a este impuesto?
Durante muchos años este impuesto ha creado conflicto. Miles de personas y organizaciones medio ambientales como 'Greenpeace' se han manifestado en contra de esta tasa y todos los problemas que suponía. Querían que cada persona, individual o colectivamente, tuviese libremente la opción que crear sus propios medios de autoabastecimiento solar. Es decir: que puedas ponerte en un tu tejado unas placas solares que abastezcan tu casa de energía. Esto ya se denominado: revoluciona energética.
Pero, ¿qué es este impuesto?
En el año 2013, la producción de energía solar en nuestro país superaba a la demanda, por lo que el Gobierno decidió aprobar un Real Decreto (900/2015), que nosotros conocemos como Impuesto al Sol, por el que los usuarios cuya instalación energética superara los 10kW deberían afrontar una tasa, incluidos aquellos emprendedores del autoconsumo que se sumaran antes de octubre de 2015. Los únicos que no se enfrentan a este impuesto (no pagar la tasa) son aquellos que se abastecen al 100% con energías renovables, que en el caso de nuestro país, son pocas personas. Este impuesto afecta a toda la península, Islas Baleares incluidas, pero excluía a las Islas Canarias.
¿Quiénes eran los perjudicados?
Este impuesto tenía muchos detractores, ya que eran varios grupos los que salían perjudicados: los particulares, pequeñas y medias empresas y algunas industrias. Algunos de estos grupos son capaces de tener control sobre su uso de la energía, de manera que reducen su gasto eléctrico (previo desembolso para instalar los sistemas).
Para aquello que no cumplieran con las leyes y no tuvieran las instalaciones apropiadas se impone una sanción económica. La multa ronda entre los seis y los 60 millones lo que hacía que muchas empresas se replantearan si realmente buscar su autoabastecimiento. "Si nos creemos el registro de autoconsumo del Ministerio, hay menos de 200 instalaciones en España. Ese es el resultado de un Real Decreto que, en lugar de fomentar el autoconsumo, lo ha amedrentado", denuncia Sara Pizzinato, portavoz de Energía de Greenpeace
¿Quiénes eran lo que ganaban con este impuesto?
Las grandes compañías eléctricas son las únicas beneficiarias de la situación, aunque se plantea como un 'peaje solidario' para proporcionar estabilidad económica al sistema y evitar que los ciudadanos paguen el autoconsumo.
Muchas organizaciones han traducido este 'peaje solidario' como una retroceso para el sistema energético, ya que supone la penalización del autoconsumo.
¿Qué dice ahora Europa con este NO?
Pues bien, después de mucho tiempo, la UE ha tomado una decisión que acaba con el conflicto: acaba con las tasas, sanciones y problemas burocráticos para que individuos y grupos crearan su propia forma de autoconsumo.
A partir de esta semana, la UE da rienda suelta al autoconsumo: la producción individual de electricidad para el consumo propio a través de distintas instalaciones, ya sean paneles fotovoltaicos y/o aerogeneradores. Es decir, tú te lo guisas y tú te lo comes. Cada uno puede regular las necesidades solares de su casa con diferentes sistemas que a su vez poseen diferentes grados de autonomía.
¿Hasta cuándo tienen los gobiernos para llevarlo a la práctica?
Aunque supone una gran victoria, no podemos olvidar que los gobiernos y el Parlamento Europeo establecieron la aportación mínima de energías renovables a un 32% hasta 2030: lo que hace que las empresas eléctricas sigan enganchadas a los combustibles fósiles y otros sistemas que contaminan el medio ambiente, y que no son viables a largo plazo.
¿Cuándo será real?
La decisión de Europa no será efectiva hasta el año 2021, para lo que aún quedan dos años, por eso, muchos individuos y organizaciones van a seguir luchando por hacer que se implante en España con la mayor rapidez posible, sobretodo, sabiendo que el nuevo Gobierno de Sánchez está dispuesto a ello para impulsar las energías renovables.