Un mueble de cocina detecta si tienes Alzhéimer

  • La manera en la que el usuario abre y cierra la puerta permite medir la capacidad de memoria que tiene

Dos ingenieros informáticos de la Universidad de Zaragoza crean un armario inteligente que detecta pérdidas de memoria. Se trata de un estudio internacional, liderado por la Universidad Complutense.

Gracias a una detección temprana se podrá adelantar la intervención y el tratamiento de posibles enfermedades neurogenerativas y/o diseñar sistemas que ayuden a estas personas en la búsqueda de los elementos necesarios en la vida diaria, mejorando su calidad de vida.

Según la Sociedad Española de Neurología, cada año se diagnostican más de 40.000 casos de Alzhéimer al año. Sin embargo, muchos pasan desapercibidos porque no se presta atención a síntomas como el de ir a buscar algo al armario y no recordar qué era.

El mueble registra desde pequeños olvidos hasta la evolución de un paciente con Alzhéimer a través de unos sensores magnéticos ubicados en sus puertas. La manera en la que el usuario abre y cierra la puerta permite medir la capacidad de memoria que tiene.

Raquel Lacuesta Gilaberte, del Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas de la Universidad de Zaragoza, y el estudiante de doctorado Franks González-Landero han participado en el diseño del primer armario inteligente, capaz de detectar desde pequeños olvidos, pérdidas de memoria inusuales hasta medir la evolución de la memoria de una persona con la enfermedad de Alzhéimer según han demostrado las últimas pruebas publicadas en Sensorsde una investigación internacional, liderada por la Universidad Complutense de Madrid (UCM).

Los resultados obtenidos han sido validados demostrando que dentro del mundo conectado de “Internet of Things”, los armarios inteligentes ayudarán a analizar y detectar posibles pérdidas de memoria en la población.

Gracias a una detección temprana se podrá adelantar la intervención y el tratamiento de posibles enfermedades neurogenerativas y/o diseñar sistemas que ayuden a estas personas en la búsqueda de los elementos necesarios en la vida diaria, mejorando su calidad de vida.

“La base para medir la memoria consiste en localizar el hecho de que el usuario abre las puertas de manera muy seguida una detrás de otra porque no encuentra lo que busca. El armario mide el porcentaje de veces que le ocurre esto al usuario y así estima su capacidad de memoria, añade Iván García-Magariño, investigador del departamento de Ingeniería del Software e Inteligencia Artificial de la UCM.

Además de la Universidad de Zaragoza y la Complutense de Madrid, en el desarrollo de este armario participan la Universidad de Harvard, el Hospital General de Massachusetts y la empresa aragonesa Edison Desarrollos.