La psiconutrición durante la cuarentena podría ser la gran aliada contra la ingesta emocinal

  • La psiconutrición te ayuda a entender por qué comes como comes, sobre todo cuando te sientes mal

  • Cristina Andrades y Griselda Herrero explican qué es la psiconutrición y cómo puede jugar a nuestro favor

Después de varias semanas encerrados en nuestras casas muchos podrán pensar que lo único que nos queda para sobrellevar el día a día es la comida. ¡Y la bebida! Las ventas de vino, cervezas y otras bebidas alcohólicas aumentaron hasta un 50% durante la tercera semana de encierro, según informa la agencia SINC. También la harina, la levadura, los huevos y otros ingredientes relacionados con la repostería se han agotado en los supermercados. Si nos han prohibido hacer la mayoría de cosas que nos gustaban, nos tendremos que dar un capricho, ¿no?

Pues claro que sí. Lo malo de este tipo de antojitos es que, para algunas personas, luego llegan los remordimientos. Que si comí demasiado, que si ahora voy a engordar, que si no me va a valer la ropa, que si por qué me comí el bizcocho entero si me prometí que me duraría cuatro días... Son este tipo de pensamientos, y no el capricho en sí, lo que lleva a muchas personas a desarrollar problemas en su relación con la comida, o en casos más extremos, trastornos de la alimentación.

Lo que comemos tiene mucho que ver con lo que pensamos, lo que sentimos y cómo nos encontramos en el momento que estamos comiendo. "Tiene una relación directa y bidireccional", explican la psicóloga Cristina Andrades y la nutricionista Griselda Herrero. "Del mismo modo que cuando nos sentimos de determinada forma podemos actuar de manera diferente, por ejemplo, comiendo, también nuestras acciones influyen en cómo nos vamos a sentir".

Cristina y Griselda son las autoras de 'Diario saludable desde la psiconutrición', una guía básica que te ayudará a entender por qué comes como comes, por qué el cuerpo te pide caprichos o por qué te sientes mal después de comerte un bizcocho entero. Además, propone una serie de ejercicios para conocerte mejor y emprender tu camino hacia la alimentación más saludable física y mentalmente.

La psiconutrición como aliada para entenderse y alimentarse mejor

"La psiconutrición es una forma de trabajo en equipo en la que se une la labor de dos profesionales sanitarios, un psicólogo y un dietista-nutricionista o TSD, de manera que podemos abordar el origen y la causa del problema y no solo centrarnos en los síntomas", explican las autoras.

Seguro que conoces a alguien a quien le ha pasado: quiere perder unos kilitos, hace una dieta, los pierde, y pocos meses después los recupera. Muchas veces ocurre que esos "kilillos" extra no son el problema, sino la causa de una mala relación con la alimentación a nivel psicológico. Estas dos profesionales de la salud defienden trabajar a la vez el cambio de hábitos alimenticios y el terreno mental para lograr un cambio definitivo y, además, conocerte y entenderte, para que cuando te vuelva a apetecer comerte el bizcocho entero sepas qué está pasando en tu cabeza.

No pasa nada por pedir ayuda, no somos superhéroes

Pero lo difícil no es darse cuenta de que comes mal. Más o menos todos somos conscientes de lo que deberíamos o no deberíamos comer. Lo difícil es trabajar día a día para mejorarlo. Estos objetivos tan grandes y tan a largo plazo tienden a resultar frustrantes porque no vemos los resultados hasta mucho tiempo después. Para Cristina y Griselda, lo primero sería definir bien "qué queremos cambiar, qué necesitamos realmente. Sin prejuicios, sin exigencias. El segundo paso es decidir si necesitamos ayuda en nuestro camino, pues no siempre podemos o sabemos hacerlo solos, y no pasa nada por pedir ayuda, no somos superhéroes o superheroínas". Las autoras de 'Diario saludable desde la psiconutrición' también recomiendan la paciencia, "ir poco a poco y ser flexibles con uno mismo".

Nuestra educación psicológica es tan básica que muchas veces ni siquiera somos capaces de pasar de la primera pregunta: ¿qué queremos realmente y cómo conseguirlo? Nadie nos ha enseñado a definir un objetivo: "Un objetivo realista es aquel que podemos cumplir en las circunstancias en las que nos encontremos, teniendo en cuenta las limitaciones, las habilidades, el entorno que nos rodea... Pero para que un objetivo tenga mayor facilidad de cumplirse, no solo debe cumplir ser realista, debe ser retador", es decir, debe ser formulado de manera positiva, no como un castigo (como te comiste todo el bizcocho, esta semana no volverás a comer más dulce); temporizable, con una fecha de principio y de final; y que dependa solo de ti.

¿Cómo puede ayudarme la psiconutrición durante la cuarentena?

Si en nuestra vida pre-cuarentena ya era difícil controlar la alimentación, (¡un cumpleaños!, ¡una fiesta de despedida!, ¡una reunión familiar!, ¡por qué lo celebramos todo comiendo!), ahora que estamos encerrados en nuestras casas con una nevera enorme y con la única opción de ir al supermercado si queremos salir un poco la cosa se complica. Esta situación puede hacer empeorar nuestra relación con la comida.

Para que no se nos vaya de las manos, las expertas recomiendan "tratar de llevar rutinas de alimentación similares a las que teníamos antes". ¿Que no eras una persona nada organizada para comer, hacer la compra y cocinar? Pues tómatelo como el reto de tu cuarentena. Si en estos días consigues, al menos, planificar menús y cumplirlos, ¡ya habrás dado un paso de gigante!

Es importante planificar bien las comidas y mantener unos horarios más o menos regulares

Desde el punto de vista de la psicología, "es importante planificar bien las comidas, mantener unos horarios más o menos regulares, cocinar, intentar no llegar con hambre a las comidas, analizar qué tipo de hambre estás sintiendo..."; desde un punto de vista nutricional, "hay que comer verduras en cada comida principal, tener a la vista frutas y alimentos saludables, incorporar alimentos saciantes, como los frutos secos, y beber agua principalmente". Cristina y Griselda coinciden, también, en la importancia de ser flexibles y comprensivos: "no podemos conseguirlo todo por las circunstancias en que nos encontramos. No pasa nada si nos sale mal, lo importante es tratar de adaptarnos a la situación de la mejor forma posible, dentro de nuestras posibilidades y de lo que necesitemos y queramos en cada momento".

Es totalmente comprensible que te cueste mucho mantener una alimentación saludable durante la cuarentena. Pero la decisión es tuya. Tú decides si prefieres darte "manga ancha" durante estas semanas y luego ponerte más serio, o si prefieres ir generando algún cambio durante los días que estés encerrado en casa. "Es importante reconocer cuál es nuestra circunstancia, nuestras posibilidades y nuestras necesidades principales", concluyen. "Y no sentirnos mal si no cocinamos o no comemos supersaludable en estos momentos. Quizá este no sea el momento para ti. No pasa nada. Y recuerda que si sientes que te desbordas, puedes pedir ayuda".