El Real Madrid afronta una semana clave en la temporada. El equipo blanco se enfrenta a Sevilla, Gladbach y Atlético de Madrid y necesita buenos resultados para salir de la crisis en la que está inmerso. Zidane no va a ser destituido porque aún cuenta con la confianza de Florentino Pérez y del vestuario.
El club presidido por Florentino Pérez ha explicado mediante un comunicado publicado las diferencias del próximo curso en relación a este a consecuencia de la COVID-19. "El ejercicio 2019/20 ha estado marcado en su últimos tres meses y medio por los efectos de la pandemia sanitaria, efectos que persistirán, previsiblemente, a lo largo de todo el ejercicio 2020/21", avisa la entidad.
"La pérdida de ingresos por la COVID-19 en el ejercicio 2020/21 afecta a las distintas líneas de negocio, fundamentalmente en el estadio, donde no se han presupuestado ingresos por asistencia a partidos, y en actividades comerciales, donde se reducen a la mínima expresión los ingresos en el Tour y tiendas, si bien existen aún incertidumbres sobre el grado de afectación definitivo que sufrirán los ingresos en función de la evolución de la situación sanitaria hasta el final del ejercicio".