Hoy jueves 18 de mayo, Barcelona se enfrenta a una huelga de autobuses de TMB que tendrá una duración de 24 horas en toda la red. Tras desconvocarse la huelga parcial de autobuses en Barcelona, llega otra convocatoria que afecta en mayor medida a los usuarios. El motivo por el que se celebra la huelga de Sevilla y la de Barcelona hoy es el mismo: reclamar la jubilación a los 60 años en el marco de una campaña estatal de movilizaciones de todos los profesionales de la conducción.
La huelga afecta de manera determinante a los usuarios de Barcelona que requieran de servicios de transporte el día de hoy.
La empresa pública Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), ha advertido a través de un comunicado que "los servicios mínimos decretados por la Generalitat" para la huelga "son insuficientes" y por lo tanto muchos viajeros tendrán dificultades para desplazarse en autobús este jueves por la capital catalana. "La empresa había pedido unos servicios mínimos del 90% y la conselleria ha dictado un 20% a todos los efectos y un 40% en horas punta", critica. Durante décadas, el hecho de tener unos servicios mínimos demasiado elevados ha sido criticado por los sindicatos por vulnerar el derecho a huelga al quedar esta sin apenas impacto.
Los servicios mínimos varían dependiendo de las horas: desde medianoche hasta las 06:30h se garantiza únicamente el 20% del servicio; de 06:30 a 09:30 horas un 40% y un "bus de barrio" por línea; de 09:30 a 16:00 horas un 20% del servicio; de 16:00 a 20:00 horas un 40% del servicio y un "bus de barrio" por línea; finalmente de 20:00 horas a medianoche un 20% del servicio.
Esta huelga tiene un impacto prácticamente total en el usuario, al extenderse durante 24 horas y mantener unos servicios mínimos bajos. TMB le pidió a Treball que "tuviera en cuenta las circunstancias del incremento constante en la utilización del transporte público, derivado en parte por la rebaja en el precio de los títulos de transporte integrado del 50%". Otro factor que ha sido criticado es que "la huelga es extensiva a todos los operadores de bus, dificultando el derecho a la movilidad en las zonas donde el transporte no da suficiente cobertura" y prevé que impacte colateralmente en el resto de transportes (metro, FGC, Rodalies, Tram) por un trasvase de pasajeros. Concretamente avisa de "aglomeraciones" en las principales estaciones de metro, según informa El Periódico.