Calviño, durísima sobre derogar la reforma laboral: "Nos pagan para solucionar problemas no para crearlos"

  • La derogación de la reforma laboral se convierte en un sainete

  • Calviño dice que sería absurdo y contraproducente abrir ese debate ahora

Un sainete en el que no parece que nadie haya quedado bien parado. La derogación de la reforma laboral que bajo cuerda había pactado el Gobierno con Bildu para lograr su abstención al estado de alarma ha acabado mostrando un gobierno al límite, sin cabeza y con más voces que ideas claras. Primero se filtra un pacto que desconocía el resto del Congreso. Y no es un tema baladí, nada menos que la reforma laboral, tan vilipendiada pero tan útil y querida por Europa, que ahora debe dar dinero.

Luego, cuando Nadia Calviño se da cuenta de lo ocurrido - nadie le dijo nada a la vicepresidenta que da la cara ante Bruselas- manda frenar. Y se deja a un lado la derogación íntegra. Luego se señala al equipo de Lastra y se apunta que esta firmó el pacto sin leerlo sin ser consciente de que este hablaba de la derogación íntegra de la reforma.

Pero Iglesias, que ve en esto un arma política para su formación, sale a los medios para decir que lo firmado es lo que vale e insiste en que lo acordado es lo firmado. Total, que Ábalos sale una vez más a apagar fuegos. Y dice que la rectificación es la que vale. Que solo se harán cambios en lo más lesivo de la ley. Y para rematar el tema se filtra que el equipo de Lastra es que ha elaborado el acuerdo y que esta confiada lo ha firmado sin leerlo. Un circo. Como consecuencia del sainete sale la palestra Otegi, de infausto recuerdo, y dice que lo firmado se pacta. Faltaría más. Y visto lo visto la CEOE dice que suspende el diálogo social porque no se van a sentar en una mesa donde ya han decidido sin contar con ellos lo que van a hacer.

Y mientras, la persona que sabe lo que es Bruselas y que es la que tiene que dar la cara para negociar las ayudas en medio de la descomunal crisis que llega se desata por la tarde diciendo lo que lleva tiempo pensando. Ahí es nada que la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y para la Transformación Digital, Nadia Calviño, sostenía que es "absurdo y contraproducente" abrir el debate de derogar la reforma laboral, en el marco de la crisis económica y social provocada por la emergencia sanitaria del coronavirus. Lo ha dicho en la inauguración de la sesión telemática 'Reflexiones políticas, económicas y sanitarias en torno a una pandemia', organizada por el Círculo de Economía.

"Con esta realidad sobre la mesa sería absurdo y contraproducente abrir un debate de esta naturaleza y generar la mas mínima inseguridad jurídica en este momento", ha dicho al ser preguntada por el acuerdo de PSOE, Unidas Podemos y EH Bildu de derogar la reforma laboral.

Cualquier modificacion debe hacerse con los agentes sociales

En este sentido, ha asegurado que se pueden dar cambios en el ámbito laboral, pero "siempre con el objetivo claro de impulsar el empleo y la actividad económica a la vez que se protege a los trabajadores". Ha sostenido que su Gobierno escucha y toma las medidas con los agentes sociales, convalidadas posteriormente en el Congreso: "Esto no cambia. Cualquier modificación se hará de forma dialogada con los agentes sociales".

"Agradezco a los empresarios el compromiso y el esfuerzo que están haciendo. Las empresas tienen un papel clave en la recuperación y cuentan con el apoyo de este Gobierno", ha añadido Calviño, quien ha resaltado el comportamiento "tremendamente responsable" de los agentes sociales.

Asimismo, ha añadido que la prioridad del Gobierno es controlar la pandemia y recuperar la actividad económica del país. "Es lo que hemos hecho y lo que seguiremos haciendo con el acuerdo de los agentes sociales y el esfuerzo de los contribuyentes", ha dicho Calviño en alusión a las medidas económicas y fiscales puestas en marcha por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.