Adiós al "FOMO financiero": cómo decir no a invertir o gastar dinero por moda (y ganar tranquilidad)
El FOMO es un término derivado del inglés Fear of Missing Out que se traduce literalmente como “miedo a perderse algo”
Cómo empezar a invertir con poco dinero (y sin ser experto)
En el mundo hiperconectado en el que vivimos hoy en día, donde las redes sociales dictan tendencias y los foros de inversión arden al ritmo de cada “oportunidad única”, crece un fenómeno que está vaciando bolsillos y llenando de ansiedad a los inversores: el FOMO financiero. Para quien no lo sepa, este término, derivado del inglés Fear of Missing Out que se traduce literalmente como “miedo a perderse algo”, se usa para describir ese impulso de gastar o invertir por temor a no aprovechar el momento. Esta sensación puede llevarnos a tomar decisiones financieras erróneas que podrían evitarse fácilmente de otro modo.
Aunque el concepto nació en el ámbito psicológico, hoy se ha extendido a la cultura popular, pero también a la economía personal y a los mercados, donde el miedo a quedarse fuera de una inversión popular puede alterar decisiones meditadas.
Un fenómeno que atrapa a ocho de cada diez inversores
La relevancia de este impulso es evidente a todos los niveles, hasta el punto de que el 83% de los inversores ha experimentado FOMO financiero al menos una vez y un 39% en varias ocasiones. La presión no viene solo de amigos o conocidos, sino de un flujo constante de publicaciones, vídeos y “casos de éxito” que se viralizan en segundos.
El caso de GameStop fue paradigmático y ejemplifican. En el año 2021, sus acciones subieron un 2.300% en cuestión de tan solo tres semanas, impulsadas por usuarios de foros como Reddit. Poco después, cayeron un 91%, dejando pérdidas millonarias a quienes entraron tarde en esta moda bursátil.
Como decíamos más arriba, este comportamiento no es exclusivo del mundo de la inversión. En el consumo diario, especialmente entre jóvenes, el FOMO “se ha convertido en una de las principales causas de gastos desmedidos, afectando su salud mental y sus finanzas”.
Cómo cortar el ciclo y recuperar el control
Los expertos recomiendan tácticas simples pero efectivas para no dejarse arrastrar. El primer paso pasa por armarse de escepticismo y desconfiar de consejos financieros en redes sociales. En su lugar, lo recomendable es investigar antes de actuar y tomarse un tiempo de reflexión antes de tomar una decisión relevante.
En el plano personal, estrategias como desinstalar temporalmente redes sociales, usar efectivo en lugar de tarjetas, crear presupuestos que incluyan un margen para ocio y tomarse al menos un d ía para pensar antes de cualquier compra ayudan a frenar los impulsos .
También es clave tener un plan financiero claro y respetarlo. Según el estudio citado, el 35 % de quienes han sentido FOMO financiero logra ceñirse a su estrategia original, y un 71 % se informa más antes de actuar, lo que refleja que resistir es posible con disciplina y educación.
En tiempos donde la inmediatez se premia, decir “no” a una inversión o compra por moda no es perder una oportunidad, sino ganar tranquilidad. Resistirse al FOMO financiero no significa quedarse al margen del progreso, sino elegir en qué y cuándo participar sin dejarse arrastrar por la urgencia ajena. Porque, como demuestra la experiencia, las modas pasan… pero las consecuencias económicas pueden quedarse mucho más tiempo.