Al contrario, de lo que pudiéramos pensar es algo que no solo es normal, sino que es y debería ser lo habitual.
El invierno y no el verano es la estación de los anticiclones más potentes y duraderos. Muchos podrían pensar que con el tiempo caluroso y con un sol sin tregua, las altas presiones campan a sus anchas de junio a septiembre. Sin embargo, no es así. ¿Por qué?
¿Por qué debemos esperar anticiclones potentísimos en invierno?
El frío y la nieve tienen mucho que ver con la presencia de los anticiclónicos. Puede parecernos contradictorio, pero no lo es. Cuando tenemos una situación de temperaturas muy bajas y de superficie nevada (algo normal en invierno) el aire pesa mucho más y genera altas presiones, es decir, un espacio muy amplio marcado por la estabilidad: se forma una barrera infranqueable al 'mal tiempo'. A tiempo más gélido, más potencia tiene el anticiclón. Por eso, son tan potentes.
Rosalía Fernández nos explica que "es muy propio de latitudes septentrionales o de Eurasia". En esta época del año, "los lugares más gélidos, como son las regiones de Groenlandia y algunas zonas de Eurasia, favorecen que ese frío tan intenso acabe dando lugar a potentes anticiclones".
En determinadas ocasiones, en España llegamos a caer bajo su radio de acción de una forma clara y evidente con tiempo despejado y temperaturas gélidas. Incluso, según la posición que tengan "bombean hacia nosotros aire muy frío dando paso a olas de frío siberianas", que son episodios "de tiempo seco, despejado, pero con máximas próximas a los cero grados o poco más en muchos puntos del interior".
Estudios recientes también demuestran que la nieve caída previamente, si supera la cantidad habitual, también contribuye a que las altas presiones sean más fuertes y tengamos un periodo de estabilidad más prolongado. Casualmente, este otoño ha sucedido así en partes de Eurasia y en Canadá. Además, las pocas horas de luz también contribuyen a ello, porque acentúan el frío extremo en superficie.
¿Y qué está ocurriendo en España?
Lejos de tener una influencia de los anticiclones anteriores, lo que está ocurriendo en estos últimos días del año es un bloqueo zonal que viene de la mano del anticiclón de las Azores. Son las circunstancias habituales de invierno en las que se refuerza y no nos abandona durante, incluso, semanas.

