El abrazo de la derrota entre Irene Montero y Belarra: de morado y sin Pedro Sánchez, que ni ha votado

Ha sido el abrazo de la derrota. De morado, como recordando el color de su partido Podemos, arrinconado ahora por Pedro Sánchez en favor de Yolanda Díaz y su Sumar. Con caras compungidas y sin el apoyo en el escaño de Pedro Sánchez, en Doñana el día en el que la ley que más daño ha podido hacer a su Gobierno ha sido reformado. No ha votado si quiera el cambio por el que más se ha enconado la relación entre Podemos y el PSOE. Y sí, ha hecho lo mismo que su archienemigo Vox, que ha hecho de las suyas decidiendo no votar. Lo mismo que un presidente que esta vez ha pactado con el PP para disgusto de Podemos que lo ha visto como una humillación.

Es la imagen de un Gobierno dividido más aún si tenemos en cuenta que el CIS de Tezanos ha sacado el mismo día una encuesta en la que pone por delante a Sumar frente a Podemos. A poco más de un mes para las elecciones autonómicas y municipales, el PSOE sería el gran vencedor de las elecciones con el 30,4% de los votos y a 4,3 puntos del PP de Alberto Núñez Feijóo (26,1% de los sufragios). No solo eso, en su estimación de voto incluye por primera vez a la plataforma Sumar de la vicepresidenta Yolanda Díaz, que aparece como cuarta fuerza política del país, por detrás de Vox y cuatro puntos por delante de Podemos. En concreto, el CIS otorga en abril una estimación de voto del 30,4% seguido del PP con el 26,1%, y ya detrás aparecen Vox con un 11,1%, Sumar con el 10,6% y Podemos con el 6,7%.

Reforma de la ley del sí es sí con el no de Podemos, ERC y Bildu

El Pleno del Congreso ha aprobado este jueves la reforma de la Ley del 'solo sí es sí' impulsada por el PSOE y negociada con el PP, que no ha contado con el apoyo de Unidas Podemos. La iniciativa ha contado, además, con el apoyo de PNV, PDeCAT, Coalición Canaria, Foro Asturias y Navarra Suma, el 'no' de ERC, Bildu y Podemos y la abstención de Junts. La iniciativa, de carácter orgánico, ha conseguido así superar los 176 votos que eran necesarios para continuar con su tramitación. Tras superar este paso, el texto será enviado al Senado.

Yolanda Díaz y Alberto Garzón, votan en contra de la reforma

Dentro del Gobierno, los ministros que son diputados de Unidas Podemos, Irene Montero, Ione Belarra, Alberto Garzón y la vicepresidenta Yolanda Díaz, han votado en contra, ésta última de forma telemática, aunque ha estado presente durante el debate. Mientras, la ministra de Justicia, Pilar Llop, y el ministro de Industria, Héctor Gómez, han votado a favor, en una votación en la que no ha estado Pedro Sánchez, ni tampoco en el debate.

Las novedades de la reforma

Este nuevo texto, entre otras medidas, modifica la horquilla de penas para la agresión sexual con violencia e intimidación de forma que este delito eleve su castigo en hasta dos años de prisión, con respecto al texto de la norma del sí es sí, impulsada por el Ministerio de Igualdad y actualmente en vigor. Para ello, modifica el artículo 179 del Código Penal.

Si en la Ley del 'solo sí es sí' se recoge una pena de cuatro a doce años para las agresiones con penetración (violación), la nueva redacción aprobada añade que en el caso de que esta violación incluya violencia e intimidación esta horquilla de penas sea de 6 a 12 años.

En el debate de esta reforma han estado presentes la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la ministra de Igualdad, Irene Montero, que se ha dirigido a la Cámara desde la tribuna tras la intervención de todos los grupos, su homóloga de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra y la titular de Justicia, Pilar Llop. Parte del equipo de Montero, su secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, y la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, han seguido la jornada desde una de las salas de la Cámara baja.

Durante le mismo, los socios del Gobierno en el Congreso han reprochado al PSOE su alineación con el PP para sacar adelante esta reforma, en lugar de pactar con la postura que han compartido el resto de formaciones que suelen prestar su apoyo a las políticas del Ejecutivo. Los socialistas, se han defendido apelando a su trabajo para legislar para "la mayoría" y como un "ejercicio de responsabilidad".