Cuba pide a la UE que abandone su posición común para normalizar las relaciones

AGENCIA EFE 12/05/2009 00:00

El canciller cubano, que se reunió hoy con la 'troika' de la UE -encabezada por la Presidencia de turno checa-, hizo hincapié en que en Cuba no hay presos políticos y que el país "es un estado de derecho", y abogó por levantar la "posición común", el documento ratificado por los 27 que rige sus relaciones con la isla en favor de una democracia pluralista y el respeto de los derechos humanos.

Rodríguez aseguró que Cuba "está dispuesta" a normalizar las relaciones con la UE, pero precisó que la postura común, que calificó de "obsoleta, unilateral, impropia de esta época moderna", constituye un "escollo" en ese proceso.

Por su parte, el comisario europeo de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, se mostró confiado en que el diálogo político, "en un momento dado y yo espero que rápidamente", pueda "poner término a la posición común o, en todo caso, modificarla", aseveró.

Michel indicó que, entre otros asuntos, en la reunión se abordaron los derechos humanos, y los europeos "preguntaron" por los presos políticos en la isla.

Apuntó que los cubanos inquirieron, por su lado, sobre el embargo de Estados Unidos a la isla, la posición de la UE respecto a Guantánamo, la situación de los inmigrantes cubanos o los vuelos ilegales de la CIA en Europa para trasladar a sospechosos de terrorismo entre 2001 y 2005.

Rodríguez afirmó que "en Cuba hay presos, como en todas partes", y garantizó que todos fueron juzgados "mediante el debido proceso" y sancionados por "delitos tipificados en leyes previas".

"Cuba es un estado de derecho y, por tanto, no constituye ningún aspecto particular ni hay ningún compromiso de Cuba en esta materia, como no lo hace ningún país soberano", apostilló el canciller, que lamentó por otro lado la existencia de "prisioneros políticos cubanos en cárceles norteamericanas".

Sobre las reticencias de la República Checa, país que preside actualmente la UE, a levantar la "posición común" europea sobre Cuba, Michel recalcó que su punto de vista como comisario es "totalmente" distinto, ya que ha percibido "avances".

"Lo que puedo afirmar es que la atmósfera, el clima, el sosiego en la discusión es un progreso considerable", concluyó.

Además, indicó que tanto la reanudación de la cooperación y el diálogo con Cuba en octubre pasado como el cambio de Gobierno en Estados Unidos, son "elementos que deberían" inclinarles a "reforzar y continuar el diálogo y a tener una posición positiva en el Consejo" de ministros europeo.

Durante el encuentro, la UE también celebró que las autoridades cubanas hayan invitado a visitar este año la isla al relator especial de Naciones Unidas contra la tortura, Manfred Nowak.

Aunque la fecha de su viaje no se ha comunicado, los europeos se muestran muy interesados en conocer su eventual informe de cara a orientar sus propias relaciones con La Habana, indicaron fuentes comunitarias.

Por último, Rodríguez fue recibido por el jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, en una reunión en la que el Alto representante dejó claro que la UE "quiere ayudar con el proceso de transición" en Cuba y consolidar el diálogo político, y en la que pidió también la liberación de todos los presos políticos, señaló a Efe su portavoz, Cristina Gallach.

Solana esperó un verdadero progreso en cuanto a derechos humanos por parte de Cuba, empezando por la liberación de todos los presos políticos, resumió la portavoz.

La "posición común" fue promovida por el Gobierno español de José María Aznar en 1996 y fijó como objetivo de la UE la promoción de la democracia y el respeto de los derechos humanos, algo que el entonces presidente cubano, Fidel Castro, consideró una injerencia intolerable dictada por Estados Unidos.

La UE y Cuba retomaron la cooperación y el diálogo tras sendos viajes de Michel y del anterior ministro cubano de Exteriores, Felipe Pérez Roque, a La Habana y París respectivamente, después de que el Consejo Europeo decidiese levantar en junio las sanciones diplomáticas impuestas a la isla en 2003 por el encarcelamiento de 75 disidentes del régimen.

En cambio, la "posición común" -que obliga a revisar cada año las relaciones con Cuba- se mantuvo, una circunstancia que las autoridades cubanas lamentan ya que reclaman su retirada como requisito para normalizar los vínculos con la UE.