Se han descubierto 26,1 kilogramos de oro de 18 quilates en forma de joyas, en el puerto de Melilla, que se encontraban escondidos entre pañales de bebé en el interior de un vehículo que desembarcaba del ferry de Almería conducido por un marroquí de 48 años residente en Alicante.
Desde la Guardia Civil han informado que la intervención se llevó a cabo el pasado 4 de diciembre sobre las 8:00 horas. Asimismo, el hallazgo se ubicaba en un turismo Audi modelo A-4 con placas de matrículas nacionales ocupado por una persona, en el momento que se producía el desembarque de los vehículos que procedían de Almería.
Durante la inspección fiscal del turismo y en la zona del maletero se pudo comprobar que llevaba diversas cajas de pañales y una caja de un ventilador. Ocultos bajo estos objetos se localizan 30 cajas de distintos tamaños, en cuyo interior se descubren lo que en un principio parecía ser bisutería. Ya que el conductor argumentó que se trataba de bisutería, pero "gracias a la pericia e intuición de los agentes de la Guardia Civil actuantes y, tras pruebas periciales realizadas, se pudo comprobar y demostrar que se trataba de oro".
El valor de las joyas intervenidas asciende aproximadamente a 900.000 euros y queda en calidad de depósito custodiado por la Guardia Civil, a disposición de la Autoridad Judicial que entiende del caso.