Torra ha calificado el acto como sencillo y sobrio y ha celebrado que se haya realizado "a la catalana manera, sin buscar fotos". También ha explicado que por la mañana ha podido entablar conversación con los familiares de las víctimas, quienes les han reclamado que los sigan acompañado. Además, ha agradecido a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que haya organizado este espacio de "agrupamiento", sin cámaras ni fotos.
"Hoy no podíamos tener otro objeto que acompañar en el dolor, en un camino que es imposible de borrar y que siempre llevarán con ellos", ha explicado, en referencia a las víctimas, a quienes han animado a decirle a la Generalitat si han fallado en algo.
Pancartas
Quim Torra ha afirmado que "lamentaría mucho" que la seguridad de la Casa Real retirara las pancartas y objetos porque forman parte de la libertad de expresión. También ha lamentado los abucheos a una persona de protocolo de la Generalitat por ir vestida de amarillo.
Sobre la separación entre las autoridades, Torra ha explicado que pidieron que quedara muy claro quién iba en representación del Estado, del Gobierno catalán y del Ayuntamiento de Barcelona: "Yo no quería estar al lado del Rey".
Homenaje en Lledoners
El presidente de la Generalitat ha afirmado que le encantaría que la ciudadanía asistiera al acto convocado la tarde de este viernes 17 de agosto delante de la prisión de Lledoners, donde está encarcelado el exconsejero de Interior Quim Forn. "No podemos normalizar esta situación tan excepcional que vive el país. Por esto tenemos que ir esta tarde en Lledoners", ha concluido.