Torra avisa a Sánchez de que no apoyará su investidura si la propuesta de "no" al referéndum es definitiva

  • Avisa que una condena de los políticos presos provocará la "desobediencia civil"

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Quím Torra, ha adelantado que su partido no otorgará la confianza a Pedro Sánchez para la investidura después de la propuesta que ha realizado el presidente del Gobierno en funciones, que ha calificado de "decepción". En ella, el único punto dedicado a Cataluña rechazaba expresamente la posibilidad de realizar un referéndum de independencia en esta comunidad autónoma.

El jefe del Ejecutivo catalán se ha referido a las 370 propuestas que presentó Pedro Sánchez el martes para negociar los apoyos a su investidura en los Desayunos Informativos de Europa Press. Según Quim Torra, con esa propuesta no se ha avanzado nada en relación a su comunidad autónoma.

"Retrocedemos", ha exclamado al tiempo que calificaba de "pura retórica" las propuestas que, ha dicho, "blindan la autonomía sin permitir ningún avance".

"Parte de una premisa falsa e irresponsable, que en Cataluña no existe problema de convivencia sino democracia y respeto a los derechos humanos", ha exclamado antes de calificar la propuesta del PSOE de "decepción".

En este sentido, ha recalcado que se trata de un "menosprecio absoluto a Junts" y ha adelantado que "si esta es la posición definitiva del PSOE" no podrán otorgarle su confianza para la investidura.

Hacia la desobediencia civil: pone a China como ejemplo

Por otro lado, Torra ha advertido de que si no hay una sentencia absolutoria de los políticos presos por el 'procés' se deberá "trazar en firme el camino hasta la independencia", lo que incluirá una respuesta de "desobediencia civil" que será "pacífica", y ha apuntado que China ha acabado cediendo ante las protestas ciudadanas en Hong Kong.

"Si China ha acabado retirando el decreto de extradición --que motivó la movilización--, a mí me parece muy relevante, muy importante", ha dicho. Ha explicado que ha hecho alusión a lo ocurrido en Hong Kong porque le sirve para preguntar "cuánta democracia" se está dispuesto a aceptar y cómo se resuelve el derecho que a su juicio tienen los catalanes a decidir su futuro. "Porque no se puede gobernar contra Cataluña", ha advertido. "Ya no esperamos ninguna propuesta de encaje en España, solo democracia, toda la democracia", ha añadido.

Preguntado sobre qué medidas baraja la Generalitat para responder a una sentencia condenatoria, ha dicho que es un asunto sobre el que trabajan las fuerzas independentistas y sobre el que no ha querido precisar más para que las conversaciones "acaben bien".

Ha añadido que llevan "meses" estudiando cómo dar una respuesta institucional, pero ha dado por supuesto que habrá también una respuesta "popular" y en este punto ha asegurado que una condena de los políticos presos provocará la "desobediencia civil" porque la sociedad catalana ha seguido el juicio en el Tribunal Supremo "de manera profunda y sentida".

Esa respuesta, ha agregado el presidente catalán, será "pacífica" y ha explicado que él entiende por una reacción pacífica la convocatoria por ejemplo de una huelga, "porque los trabajadores tienen derecho a convocarla". "El derecho de protesta es fundamental, hay que respetarlo, como el derecho a la libre expresión y de concentración", ha asegurado.

Torra ha respondido ante las especulaciones sobre un adelanto electoral en Cataluña que es "lo último" que le preocupa y que una campaña provoca una confrontación que impediría a los partidos concentrarse "en lo importante": cómo responder a la "la situación grave y difícil" que van a vivir tanto su comunidad autónoma como el conjunto de España cuando llegue la sentencia del Supremo.

Ha reiterado que en este escenario no cabe a su juicio la convocatoria de elecciones y ha reclamado que el independentismo se concentre en la respuesta a la sentencia. "Es de una injusticia aberrante si no es absolutoria", ha recalcado.

Quim Torra ha explicado que en el proceso que vive Cataluña hubo un primer hito que fue la sentencia del Tribunal Constitucional que rechazó algunos artículos del Estatuto de Autonomía y que en su opinión "enterró el pacto constitucional". Y la sentencia del Tribunal Supremo sobre el proceso independentista abrirá "una nueva etapa" si no es absolutoria.