La Justicia de EEUU difunde los papeles migratorios del príncipe Harry en pleno debate sobre la legitimidad su visado

El príncipe Harry. Europa Press
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El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) ha hecho públicos los registros de inmigración del príncipe Harry en pleno debate sobre si obtuvo algún tipo de trato preferencial en la concesión de su visado. La cuestión, concretamente, ha surgido después de que una organización conservadora, la Fundación Heritage, haya puesto en duda que cumpliese los requisitos legales para obtenerlo, como la inexistencia de pruebas de haber consumido drogas en el pasado.

A raíz del caso, un magistrado exigió el fin de semana que los archivos relacionados con su solicitud del visado estadounidense se hiciesen públicos antes del martes, tras lo cual ahora se han compartido los citados registros de inmigración del duque de Sussex.

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Específicamente, se trata de seis documentos judiciales que, no obstante, evitan ofrecer detalles acerca de lo que el duque de Sussex incluyó en formulario de inmigración en EE.UU y se centran en ofrecer expedientes judiciales de varias agencias federales en respuesta a la solicitud de la Fundación Heritage, según la cadena CBS News.

Uno de esos documentos, –que incluyen fragmentos y páginas censuradas–, advierte de que si se revela su información exacta podría haber un “daño potencial en forma de acoso”.

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Así, en la publicación de estos registros de inmigración se ha evitado la difusión de datos clave como la petición de visado o la respuesta al consumo de drogas.

La demanda de la Fundación Heritage: ¿Mintió el príncipe Harry para obtener el visado?

Con el príncipe Harry en el punto de mira, la Fundación Heritage se sirvió de las informaciones reveladas en su propio libro biográfico ‘Spare’ sobre su consumo de drogas para, ante las dudas suscitadas al respecto, presentar una demanda contra el DHS exigiendo información relacionada con el proceso de aprobación de su visado.

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Dicho de otro modo, la Fundación Heritage pretende descubrir si el duque de Sussex mintió para obtenerlo, argumentando que “la ley estadounidense suele considerar a una persona inadmisible para su entrada” en Estados Unidos si hay pruebas de que ha consumido drogas en el pasado.

Por eso, después de que en su biografía ‘Spare’ (En la sombra) el príncipe Harry reconociese que consumió drogas cuando era adolescente, como cocaína y marihuana, reclamaron que su historial de inmigración se hiciese público, dado el interés del caso.

En ese sentido, un documento judicial del pasado 13 de febrero apuntaba que, según Heritage, el duque de Sussex “probablemente violó numerosas leyes que deberían haberlo inhabilitado para la admisión”.

Al respecto, la Fundación advierte de que, “si se le admitió sin una exención ni entrevista con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP)”, se le otorgó “un trato preferencial que socavaría la confianza pública en la aplicación de la justicia igualitaria ante la ley”.

El duque de Sussex y su estancia en Estados Unidos

El príncipe Harry, junto a Meghan Markle,padre de dos hijos, se casaron en 2018 y viven en California desde 2020 tras su decisión de abandonar la familia real británica.

Sobre esa decisión, en su libro ‘Spare’ el príncipe Harry afirma que incluso consultó con una mujer con “poderes”, –sin dar su nombre ni decir si era vidente–, que le dijo que su madre, la fallecida Diana de Gales, aprobaba su decisión de iniciar una nueva vida en EEUU con la actriz estadounidense.

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