Madrid Donald Trump prosigue su batalla comercial y ha prometido que los aranceles pendientes a semiconductores entrarán en vigor "en un futuro muy próximo". El presidente de EEUU ha sugerido que entre sus medidas se puede colar alguna excepción, apelando a la necesidad de "flexibilidad". La intención del republicano es que se fabriquen en territorio estadounidense sus chips y semiconductores y otros bienes como los productos farmacéuticos y sanitarios, que también gravará. Una información en vídeo de la periodista Sonia Losada.

La Administración norteamericana, tras un fin de semana de idas y venidas a cuenta de los aranceles a productos tecnológicos, Trump ha explicado lo que hará con los semiconductores y otros productos: "lo mismo" que con otros bienes importados como el acero, el aluminio o los automóviles sobre los que ya hay tasas específicas, ha dicho el presidente a los medios a bordo del Air Force One, el avión presidencial estadounidense, en tránsito a Washington desde Florida, donde pasó el fin de semana.

El republicano tras ser preguntado sobre si su Gobierno hablará con empresas estadounidenses insignias, como Apple sobre la aplicación de aranceles a sus teléfonos, tabletas u ordenadores, ha respondido: "Hay que mostrar cierta flexibilidad".

El presidente, que ha abogado por instar a la fabricación nacional, no ha aclarado si algunos productos como teléfonos móviles o tabletas pueden quedar exentos, aunque ha dejado abierto tener "cierta flexibilidad" y "no ser tan duro".

Trump: "Económicamente nuestro país va a ser más fuerte que nunca"

"Queremos fabricar nuestros medicamentos en este país, y al imponer aranceles a las empresas que no están en este país vamos a fabricar nuestros medicamentos en Estados Unidos para que, en caso de guerra, o lo que sea, no dependamos de China ni de otros países", añadió.

"Económicamente, nuestro país va a ser más fuerte que nunca", ha asegurado, horas después de que el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, desvelase que los teléfonos inteligentes, ordenadores y microprocesadores y otros dispositivos electrónicos, que fueron excluidos a última hora del viernes de los aranceles recíprocos, formaran parte de ese nuevo gravamen sobre los semiconductores.

Lutnick anticipó que estos aranceles llegarán "probablemente en uno o dos meses", en declaraciones a la cadena de televisión estadounidense ABC News.

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