Reyes Rigo, la única activista española de la Global Sumud Flotilla bajo custodia de Israel, será deportada el sábado a España
El tribunal de Beer Sheva habría aceptado el acuerdo después de que Rigo se declarase culpable
La activista mallorquina Reyes Rigo alcanza un acuerdo con la Fiscalía israelí para ser deportada de vuelta a España
La activista Reyes Rigo, la única integrante española de la Global Sumud Flotilla bajo custodia de Israel, será deportada este sábado 11 de octubre. Así lo ha informado el medio israelí ‘Yedioth Ahronoth'. La regidora de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Palma, Lucía Muñoz, ya había asegurado que el cónsul español le había afirmado al hermano de la activista que había llegado a un acuerdo con la Fiscalía israelí.
La familia de Rigo sigue esperando para poder hablar con el abogado que defiende a la activista mallorquina y pagar la multa que le ha impuesto el juez, tal y como informa EFE.
Rigo se declara culpable de un asalto agravado a una guardia de prisión
El Ministerio de Asuntos Exteriores no ha confirmado la liberación de la española ni si hay un acuerdo que lo permita. El departamento, encabezado por José Manuel Albares, se ha limitado a señalar que “el cónsul ha asistido a la vista oral y ha trasladado toda la información a la familia".
El medio israelí citado ha afirmado que el tribunal de Beer Sheva ha aceptado el acuerdo después de que Rigo se declarase culpable de haber provocado daño corporal y de asalto agravado a una guardia de la prisión. Hoy se habían presentado cargos contra ella por morderle en el brazo y negarse a entrar en la celda.
Rigo denuncia malos tratos en prisión
El Tribunal la ha condenado a 10 días de cárcel -que ya ha cumplido-, al pago de unos 2.650 euros y a su deportación que se producirá el sábado. Rigo ha relatado ante el juez que ha recibido malos tratos bajo custodia: “Nos golpearon, nos empujaron y el quinto día atacaron a mi amiga e intenté protegerla”.
"Me cogieron por la cabeza y se me cayeron las gafas", ha resaltado. La activista ha denunciado que en una celda para cinco personas había 14 mujeres, que no les dieron agua y que la comida “estaba podrida".