Las autoridades trabajan de forma exhaustiva en revelar todas las incógnitas; en intentar descubrir cuál fue la motivación que llevó a Alek Minassian a perpetrar una masacre en Toronto, provocando el pánico en la intersección entre la calle Yonge St. y la avenida Finch Ave.
"Mátame. Dispara a la cabeza", es lo que le dijo a las autoridades cuando estaba siendo detenido después de asesinar a 10 personas y dejar heridas a otras 15. Lo hizo con una furgoneta alquilada, arrollando uno tras otro a los peatones que se encontraban en la zona. “Simplemente, comenzó a atropellar a todo el mundo”, ha relatado un testigo de los hechos, conmocionado por lo que hubo de presenciar.
Por el momento, la Policía de Toronto ha advertido que la investigación va a ser “larga” y precisamente requerirá de “múltiples testigos” y toda la ayuda posible para definir y reconstruir lo ocurrido.
Minassian no tiene ninguna vinculación conocida con ningún grupo terrorista y en los archivos de la policía no existía “nada” sobre él. Apenas se conoce que es un estudiante de 25 años de la Universidad Seneca de Toronto y que procede de Richmond Hill, en Ontario, Canadá.
Por ello, y por la gravedad de lo ocurrido, cada detalle será examinado con cautela y la máxima exhaustividad con el fin de esclarecer el suceso. De momento, la Policía continúa descartando definirlo como terrorismo, y en consecuencia sostienen que no presenta una amenaza mayor para la seguridad nacional.
Por esa razón, el ministro de Seguridad Pública del gobierno federal canadiense, Ralph Goodale, ha informado de que se mantiene el nivel de riesgo de atentado terrorista en “medio”, desestimando elevarlo tras lo sucedido.
IMPUTADO POR 10 CARGOS DE ASESINATO
Entre tanto, el detenido ya ha comparecido ante el tribunal competente. Y lo ha hecho mostrándose impasible, sin apenas dar muestra de emoción ante los cargos que se la han imputado: diez cargos de asesinato y trece de intento de asesinato.
Según informa el medio local CBC, Minassian se ha limitado vagamente a dar su nombre y confirmar que entendía las condiciones impuestas por el tribunal.