Las autoridades de Nueva Orleans, EE.UU, realizaron el domingo varias detonaciones para derribar dos grúas inestables. Se utilizaban para la construcción del hotel Hard Rock cuyos pisos superiores se derrumbaron una semana antes.
Las dos grúas quedaron bastante dañadas con el derrumbe de los últimos pisos del hotel. Estas máquinas pesan miles de toneladas y se habían inclinado peligrosamente por lo que las autoridades temían que pudieran venirse abajo y causar más daños.
Tras reunir a varios expertos, incluyendo a varios ingenieros que trabajaron en demoliciones tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, las detonaciones se llevaron a cabo. Una de ellas cayó a tierra pero parte de la otra grúa se podía ver colgando todavía sobre el edificio.
Tres trabajadores murieron por el derrumbe del hotel, sin embargo, solo el cuerpo de uno de ellos ha sido encontrado. La alcaldesa de Nueva Orleans, LaToya Cantrell, dijo que retirar los cuerpos es la siguiente prioridad después de retirar las grúas. Las autoridades siguen investigando las causas del derrumbe.