Españoles en Austria: "Es como en la primera ola de España con UCIS colapsadas y cadáveres en pasillos"

  • Austria es el primer país de Europa que vuelve a confinar a toda su población

  • El confinamiento en Austria estará en pie durante un periodo de 20 días

  • Los ciudadanos solo saldrán a la calle para lo imprescindible

Austria es el primer país de Europa que vuelve a confinar a toda su población, en un intento por frenar las infecciones de la sexta ola del coronavirus.

El confinamiento estará en pie durante un periodo de 20 días, tras lo que la medida se mantendrá en pie para aquellas personas que no estén vacunadas, tal y como ocurre desde el 15 de noviembre, según ha recogido el diario austriaco 'Die Presse'.

Así, los austriacos solo saldrán a la calle para lo imprescindible, y además, la vacunación contra el coronavirus será obligatoria a partir del mes de febrero.

Esta difícil situación epidemiológica de Austria recuerda a algunos de los españoles que se encuentran en el país los peores momentos que vivimos en 2020: "Se empiezan a ver imágenes como España en la primera ola, UCIS colapsadas, cadáveres en los pasillos", señalan.

El encierro tendrán que vivirlo con resignación, aunque se echen de menos ciertas cosas, y al menos será así mínimo durante los próximos 10 días.

Austria, primer país de la Unión Europea con vacunación obligatoria

El canciller de Austria, Alexander Schallenberg, ha anunciado este viernes que las autoridades impondrán un nuevo confinamiento a nivel nacional a partir del lunes por 20 días y ha afirmado que la vacunación contra el coronavirus será obligatoria a partir del mes de febrero.

La decisión responde a que en el país se ha vacunado el 65% de la población y la tasa de contagio es de casi 1.000 casos por cada 100.000 habitantes en siete días.

Austria se convierte en el primer país de la Unión Europea (UE) en introducir una vacunación obligatoria contra el coronavirus en el conjunto de la población. Quienes no cumplan con la normativa se enfrentarán a sanciones administrativas.

"No es fácil para nosotros, pero ante el número de contagios tenemos que tomar estas medidas", ha dicho Schallenberg, quien ha señalado que es "doloroso" tener que imponer este tipo de restricciones, teniendo en cuenta que hay vacunas suficientes para la población.