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Una profesora británica de 23 años, estuvo a punto de morir un trastorno alimenticio que sufría desde hacía cuatro años y cuyos síntomas se agravaron durante el confinamiento. Ahora ha conseguido recuperarse y rehacer su vida gracias a la ayuda médica.
Kelly Louise Appleton fue diagnosticada con un trastorno alimenticio cuando tenía 19 años, pero el confinamiento por el coronavirus no hizo más que empeorar su enfermedad. En este momento, los casos de anorexia en España aumentaron un 30%.
Su problema comenzó en la universidad, cuando le diagnosticaron anorexia a los 19 años, sin embargo todo empeoró con la pandemia, cuando fue clasificada como "clínicamente vulnerable" por su baja cantidad de glóbulos blancos, explica Manchester Evening News.
"En ese momento nadie sabia lo que estaba pasando con el confinamiento", explicaba Kelly. En abril de 2020, la joven fue derivada a psiquiatría tras la intervención de su madre. "Entonces me llevaron a un psiquiatra que me dijo: 'Probablemente te queden un par de semanas de vida. Tu cuerpo se está apagando. Tus órganos están fallando". En ese momento el miedo se apoderó de ella y llegó a decirle a su madre que moriría antes que ella. Para Kelly, este fue el punto de inflexión en su vida.
Durante los siguientes meses pudo controlar su enfermedad gracias a la vigilancia de los especialistas. Kelly estudia ahora un máster en psicología y cree que es necesario trabajar más para abordar los problemas que la pandemia ha dejado en la salud mental. También reclama más ayuda para aquellas personas que padecen un trastorno alimenticio, para que se pueda actuar antes de que la situación sea tan grave como la suya, llegando a temer por su vida.
"La gente puede pensar: 'Oh, creo que he engordado, tengo que ponerme a dieta', y creo que esto podría alimentar sus trastornos alimenticios. Creo que ahora es el momento de concienciar y estar atentos a las señales y los desencadenantes incluso en las personas más jóvenes", denuncia Kelly.
Se calcula que en Reino Unido hay alrededor de 1,25 millones de personas que padecen un trastorno alimenticio. En España la cifra es de unas 400.000 personas, la mayoría mujeres (9 de cada 10) y sus síntomas suelen aparecer entre los 13 y los 20 años.