Melbourne, la ciudad más confinada del mundo, afronta por fin la desescalada

  • Melbourne, en Australia, afronta por fin la desescalada

  • Melbourne es la ciudad más restrictiva del mundo por el coronavirus

  • Sus cinco millones de habitantes han pasado en confinamiento estricto 263 días

En un escenario mundial en el que el coronavirus está en pleno retroceso, gracias a la vacunación, Melbourne es la ciudad más restrictiva del mundo. Sus cinco millones de habitantes han pasado en confinamiento estricto 263 días, casi nueve meses en total, desde que comenzara la pandemia.

Durante una rueda de prensa durante la mañana del domingo, el primer ministro del estado, Daniel Andrews, ha confirmado que las autoridades sanitarias esperan que para el jueves la región haya alcanzado su objetivo de vacunar al 70 por ciento de la población mayor de 16 años.

Así, en la ciudad de Melbourne se levantará el toque de queda y se eliminará la prohibición de viajar más allá de 15 kilómetros, aunque se mantendrán restricciones de movilidad entre la ciudad y el resto del estado.

Además, locales al aire libre como cafés, cines o piscinas podrán abrir sus puertas a no más de 50 personas, siempre y cuando se apliquen límites de aforo, según recoge la cadena australiana ABC.

El anuncio supone el fin de los cierres en la región

En cuanto a los locales de interior, como restaurantes, el límite estará en 20 personas, siempre y cuando estén todas completamente inmunizadas contra la enfermedad.

Según Andrews, el anuncio supone el fin de los cierres en la región. "Nos estamos alejando de eso", ha asegurado el mandatario. "Ya no encerramos a todo el mundo, en vez de eso le cerramos el paso a los que no están vacunados", ha defendido.

Y es que según las autoridades sanitarias, alrededor del 90 por ciento de los pacientes que se encuentran actualmente en hospitales de la región por culpa de la enfermedad son gente no vacunada, así como el 97 por ciento de los que se encuentran en unidades de cuidados intensivos.

En todo el país, de 25 millones de habitantes, han muerto desde que comenzó la pandemia 1.532 personas por la enfermedad, y han sido completamente inmunizadas poco más de 14 millones, casi el 56 por ciento, según datos de la Universidad Johns Hopkins.