El Parlamento italiano vota para enviar a Salvini al banquillo

  • Está acusado por secuestro de personas, al impedir el desembarco de 131 migrantes de un barco italiano

  • Los magistrados todavía deben determinar si se abre juicio contra él

El pasado 27 de julio el buque militar italiano 'Gregoretti' rescató en el Mediterráneo a 131 personas. Pidió autorización al centro de coordinación de socorro marítimo, en Roma, para desembarcar. Sin embargo, el entonces ministro del Interior, Matteo Salvini, se lo denegó, aferrándose a un decreto ley -aprobado por él mismo- que le permitía esta posibilidad. Cuatro días más tarde, el 'Gregoretti' atracó en el puerto siciliano de Augusta con los migrantes a bordo.

Se encontró una solución relativamente rápida, comparada con la espera que han tenido que soportar las ONG en este tipo de operaciones, ya que se trataba de un barco militar con bandera italiana. Esto, en la práctica, significa que el Estado se tiene que hacer cargo y además no era posible inmovilizar un buque de estas características por un periodo indefinido. Salvini cedió, pero ahora el Parlamento italiano le ha retirado la inmunidad a para que sea juzgado por estos hechos, acusado de “secuestro de personas”.

La mayoría parlamentaria, formada fundamentalmente por el Movimiento 5 Estrellas (M5E) y los socialdemócratas del Partido Democrático (PD), han votado a favor de mandar al líder ultraderechista al banquillo. Mientras, el partido de Salvini, la Liga, se ha ausentado del hemiciclo.

Él, en la postura desafiante que le caracteriza, ha manifestado que lo “volvería hacer todo”. “Hace falta un juicio para decidir de una vez si tengo razón. La verdadera sentencia la dará el pueblo, no la magistratura”, dijo desde su escaño de senador. Antes, se había expresado en Twitter con mensajes patrióticos y una cita del poeta Ezra Pound, referente de grupos neofascitas.

¿De qué se le acusa?

De haber retenido a 131 personas en contra de su voluntad sin que representaran ningún peligro para la seguridad del Estado. Así al menos lo expresa un tribunal de Catania, que es quien lo acusa. Según la denuncia, las convenciones internacionales obligan a que después de un salvamento en el mar, los náufragos sean transferidos inmediatamente a un lugar seguro. En este caso, no había dudas de qué país debería acogerlos, porque además el barco es italiano.

Los jueces consideran como agravante que muchos de los rescatados presentaban sarna o tuberculosis, por lo que debían ser tratados. La denuncia añade que la decisión fue “arbitraria”, que “no había una motivación real” y que Salvini actuó por una razón meramente política.

¿Cómo se defiende Salvini?

Ha repetido en numerosas ocasiones que actuaba por el bien de los italianos, aunque en su defensa deja implícita que existía esa motivación política. “Reivindico con orgullo haber mantenido una promesa electoral. Todos sabían que habríamos hecho de todo para bloquear los desembarcos de clandestinos y lo hicimos durante más de un año con los amigos del Cinco Estrellas”, defendió durante su comparecencia en el Senado.

Ese es otro de sus argumentos políticos, que no actuó solo, sino como miembro de un Gobierno en el que todos sabían cuáles eran sus posiciones. El Movimiento 5 Estrellas, con quienes la Liga compartía el Gobierno, ya le salvó en un caso idéntico. En aquel momento, mientras su pacto seguía en pie, el M5E votó a favor de mantener la inmunidad parlamentaria de Salvini, al entender que todo el Ejecutivo actuó unido para impedir el desembarco de migrantes del barco militar 'Diciotti'. Sin embargo, ahora que los ‘grillini’ son aliados del PD, consideran que no hubo connivencia en el caso del 'Gregoretti', pese a que ellos también formaban parte del Gobierno.

En cualquier caso, esto parece más una defensa política que legal. Los jueces deberán determinar si hubo o no delito, no el cambio de parecer del M5E. Salvini se defiende envalentonado, pero los miembros de su partido se ausentaron de la votación, aconsejados por su abogada Giulia Buongiorno. Según esta diputada, votar a favor del procesamiento implicaría jurídicamente reconocer la culpabilidad.

¿Significa que Salvini va a ser juzgado?

No todavía. Lo que ha decidido el Parlamento es que el asunto quede en manos de los jueces. Salvini pasa a estar oficialmente imputado, aunque ahora debe pronunciarse el fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro, quien ya ha recibido la denuncia del tribunal de esa ciudad. Zuccaro es conocido por su mano dura contra las ONG que salvan migrantes en el mar y ya hace meses pidió que se archivara la causa contra Salvini.

En cualquier caso, al ex ministro del Interior se le acumulan los casos, porque el próximo 27 de febrero el Senado deberá pronunciarse por un episodio muy similar, en el que está implicado la organización española Open Arms. Ocurrió el pasado agosto, cuando la ONG pasó tres semanas en el mar, a la espera de autorización para desembarcar. También en esta ocasión se le acusa a Salvini de secuestro de personas.

¿Cómo afectará políticamente?

El líder de la Liga ha adoptado una posición muy similar a la de Donald Trump ante el ‘impeachment’. Gracias a la mayoría que le dan los sondeos, juega la baza de que los italianos le respaldan contra las élites políticas y la magistratura, que lo persiguen. Debe de estar muy convencido de que finalmente no será condenado. Sin embargo, si el caso pasa el filtro del fiscal de Catania, el panorama se le pondría muy oscuro al líder ultraderechista.

Todo dependerá, en buena medida, del alcance del caso. Aunque ya hubo un primer test político, no especialmente favorable para Salvini. Justo antes de las pasadas elecciones regionales de Emilia Romaña decidió inmolarse, pidiendo a sus diputados que votaran a favor de retirarle la inmunidad parlamentaria. Se presentó como víctima de un proceso urdido contra él, pero su partido perdió las elecciones por una distancia de ocho puntos contra la izquierda.