Tras el varapalo del viernes pasado en el Congreso estadounidense, por el cual los republicanos - con mayoría- tuvieron que retirar su propuesta para sustituir la reforma sanitaria del Presidente Obama, conocida por el Obamacare por el Trumpcare y dejarla en “linea muerta”, ahora llega el momento de las políticas medioambientales.
A juicio de la nueva administración la Orden Ejecutiva de Obama del 2013 sería una de las causantes de la pérdida de puestos de trabajo masiva en los estados más industriales del país, a causa de las enormes trabas administrativas que hay que cumplir desde entonces destinadas a proteger el medioambiente.
La firma de esta nueva orden ejecutiva que revierte se firmará en la Agencia de Protección Medioambiental. El Presidente Trump ya dio muestras de su escepticismo sobre el cambio climático durante toda la campaña electoral, pero fue en sus primeras semanas cuando dio orden de finalizar los dos oleoductos más importantes de Estados Unidos, paralizados por la administración anterior. El Proyecto Keystone XL supone la construcción del mayor oleoducto de Estados Unidos y que afecta también a Canadá, donde comienza el proyecto que llega hasta los estados de Illinois, Texas y Oklahoma.
Según la CNN, la Administración Trump asegura que defiende “ el cuidado del medio ambiente, y también el crecimiento económico de Estados Unidos y los puestos de trabajo”. Citando fuentes de la actual administración dicen que la nueva orden se centrará en “aire limpio y aguas limpias”, pero que más importante que el medio ambiente son “los puestos de trabajo”.
La orden ejecutiva que se firmará este martes incluye la revisión pormenorizada del “Acta del Plan de Energías Limpias” firmado por el expresidente Obama.