El local en la zona de la explosión en Vallecas podría ser un negocio clandestino: investigan si fue el origen del estallido
La Policía mantiene abierta la investigación para determinar el origen exacto del estallido en Vallecas que causó un muerto
Los dueños del bar en Vallecas niegan que la explosión se produjera en el establecimiento: "Nuestro bar está impecable"
Vallecas está de luto por la muerte de Fabio, el hombre fallecido tras la explosión ocurrida el pasado sábado. El hallazgo del cuerpo se produjo de madrugada, después de que los bomberos realizaran una nueva búsqueda, junto a la unidad canina de la Policía Nacional, tras el aviso de sus familiares, que no le localizaban. Las autoridades volvieron a buscar entre los escombros de la explosión y finalmente hallaron el cuerpo del hombre de 52 años.
Por el momento, la Policía mantiene abierta la investigación para determinar el origen exacto del estallido. Aunque en un primer momento se barajó la posibilidad de una fuga de gas, todavía no hay confirmación oficial.
Las autoridades investigan el origen de la explosión
La policía continúa investigando el origen de la explosión. Las autoridades buscan pruebas en el local de al lado del bar, que ha quedado totalmente destruido. En el barrio hay rumores de que albergaba un negocio clandestino de fabricación de drogas.
El jefe de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, Carlos Marín, ha indicado que el edificio tiene una estructura de hormigón y acero que tiene afectada "gravemente" una región de unos 50-60 m2", pero ha añadido que "hay que hacer una valoración entera".
La vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, ha informado que los vecinos de este edificio de nueve viviendas han sido realojados, "al menos durante algunas días", debido al daño en la estructura, que ha sufrido "importantes afecciones al forjado entre la planta cero y la planta primera".
No se sabe el origen de la explosión
Los propietarios del bar aseguran que la detonación no se produjo en su establecimiento, sino en el local contiguo. Como prueba, señalan que dentro del bar había entre 8 y 10 personas en el momento del estallido, todas ellas con heridas leves, y que apenas se han registrado daños materiales en su negocio. “Nuestro bar está impecable, no hay ni un cristal roto”, recalcan.
El local adyacente, en cambio, sufrió los destrozos más graves. Según los testigos, la verja que lo cubría salió despedida por la fuerza de la explosión y terminó incrustada en un coche aparcado en la calle. La zona permanece acordonada mientras los agentes recopilan pruebas para esclarecer lo sucedido.