Cómo ahorrar gasolina sin tener que dejar de usar el coche

MadridLos precios del combustible en España siguen marcando máximos: llenar un depósito de gasolina cuesta hoy de media más de 85 euros, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica. Esta realidad golpea directamente al bolsillo de millones de conductores que dependen del coche para trabajar, llevar a los niños al colegio o moverse en zonas con escasa oferta de transporte público. Sin embargo, renunciar al vehículo privado no siempre es una opción viable. ¿Cómo reducir entonces el consumo de carburante sin dejar de conducir?

Una conducción más eficiente

La forma en que se conduce influye directamente en el consumo de combustible. Mantener una velocidad constante y moderada es clave. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), conducir a 90 km/h en carreteras convencionales puede reducir el consumo hasta en un 30% en comparación con velocidades más altas. Además, evitar aceleraciones y frenadas bruscas contribuye significativamente al ahorro de gasolina.

El uso adecuado de las marchas también es fundamental. En vehículos con transmisión manual, cambiar a marchas más altas lo antes posible y mantener las revoluciones del motor bajas ayuda a reducir el consumo. Además, anticipar el tráfico y utilizar el freno motor en lugar del pedal de freno cuando sea posible puede mejorar la eficiencia del combustible.

También hay que asegurarse de mantener la aerodinámica del vehículo siempre que sea posible, sobre todo cuando aumentamos la velocidad. Esto implica no llevar elementos que sobresalgan del vehículo, y mantener las ventanas cerradas para evitar que el aire dificulte el avance del coche, aumentando así su consumo.

Mantenimiento del vehículo: una inversión que rinde

Un coche bien mantenido no solo es más seguro, sino también más eficiente. Revisar regularmente la presión de los neumáticos es esencial, ya que una presión inadecuada puede aumentar el consumo entre un 2% y un 4% . Asimismo, reducir el peso del vehículo eliminando objetos innecesarios del maletero y retirando las barras de techo cuando no se utilizan puede disminuir el consumo hasta en un 6%.

Planificar las rutas con antelación para evitar recorridos innecesarios y congestiones también contribuye al ahorro de combustible. Además, realizar el mantenimiento periódico del vehículo, como cambios de aceite y revisión de filtros, asegura un funcionamiento óptimo y eficiente.

Uso inteligente de accesorios y tecnología

El aire acondicionado y otros sistemas eléctricos del coche pueden aumentar el consumo de combustible. Utilizarlos de manera moderada y solo cuando sea necesario es recomendable. En trayectos urbanos, es preferible bajar las ventanillas, mientras que en carretera, mantenerlas cerradas y usar el aire acondicionado a baja potencia puede ser más eficiente.

Algunos vehículos modernos cuentan con modos de conducción "Eco" que ajustan el rendimiento del motor y otros sistemas para maximizar la eficiencia del combustible. Sin embargo, es importante utilizarlos en situaciones adecuadas, ya que en ciertas condiciones, como adelantamientos o incorporaciones en autopistas, pueden no ser recomendables.

Ahorrar gasolina sin dejar de usar el coche es posible mediante una combinación de conducción eficiente, mantenimiento adecuado y uso inteligente de los sistemas del vehículo. Adoptar estas prácticas no solo beneficia al bolsillo del conductor, sino que también contribuye a la reducción de emisiones y al cuidado del medio ambiente.