Sol, Luna, meteorología: ¿sabrías orientarte si te pierdes en una isla?

Elsa Alonso 24/05/2017 17:20

Si no eres 'el último superviviente' y no has visto todos los capítulos a conciencia, no hay problema. Saber qué hora es y dónde está el Norte puede descubrirse por medio del Sol, la Luna, las estrellas y las señales que nos envía la Naturaleza.

Mira al cielo y sigue la estela del Sol

Sabiendo que sale por el Este y se pone por el Oeste, tan solo hay que ser paciente y observar los pasos de la estrella. Pasadas unas horas podremos localizar estos dos puntos cardinales y, por ende, el Norte y el Sur. Pero si no tenemos todo el día para comprobarlo, podemos calcularlo en solo diez minutos con ayuda de un palo. Sigue estos pasos:

· Localiza un palo o un objeto alargado que deje una sombra en el suelo bien definida.

· Clávalo en la arena, sobre una superficie llana, y haz una marca en el punto en que acabe la sombra.

· Pasados diez minutos, la sobra se habrá movido ligeramente y deberás hacer una segunda marca siguiendo el mismo procedimiento.

· Une con una línea recta las dos marcas, sabiendo que la primera situará el Oeste y la segunda, el Este. El Norte de tu brújula improvisada estará en la perpendicular a esta línea recta trazada, con la primera marca a su izquierda y la segunda a su derecha.

¿Cuándo no será posible realizar esta técnica? A las doce del mediodía. A esta hora el sol se encontrará en el punto medio del recorrido y caerá sobre el palo sin generar ninguna sombra a su alrededor.

Pero puedes estudiar la hora que es de una forma más exacta conociendo por dónde amanece y atardece. La clave está en saber dos datos: qué estación del año es y en qué hemisferio estamos. Si estás en el hemisferio Norte, mira al Sur, y si estás en el hemisferio Sur, gírate hacia el Norte, guiado por la sombra del palo sobre la arena:

· Una vez de frente al Ecuador (la línea imaginaria que sigue el Sol en el cielo), divídelo en tramos de un lado al otro del horizonte. Los tramos equivalen a las horas de luz del día, por lo que si es invierno, tendrás que hacerlo en 10 partes, si es verano, en 14, y si es otoño o primavera, en doce.

· Si el sol se encuentra a cuatro puños del horizonte Este, por ejemplo, significa que hace cuatro horas que amaneció.

La Luna también te dará una pista con las horas

Si has naufragado en la noche y estás inmovilizado por la oscuridad, busca la Luna.

· Divide la Luna en tiras verticales. Cada tira, como en el anterior caso, equivaldrá a una hora de la noche y se contarán de derecha a izquierda.

· A medida que transcurra la noche, la Luna irá mostrándose de claro a oscuro de derecha a izquierda, de tal manera que si lo que vemos por satélite es una pequeña franja iluminada a la derecha, significa que acaba de empezar la noche.

· Si está a punto de producirse el amanecer, observaremos una Luna más iluminada por el lado izquierdo y muy fina.

¿Cuándo no será válido? Con Luna llena. De derecha a izquierda y de arriba abajo estará iluminada y no podremos avistar las horas.

Las estrellas te guiarán

Dependiendo de si estas en el hemisferio norte o en el sur, verás unas estrellas u otras, pero hay un constelación que nunca falla: la de Orión. Esta es una característica del Ecuador y es visible desde ambos hemisferios dependiendo de la época del año.

De todas las estrellas que lo forman, hay tres que son especialmente brillantes y que conforman el conocido como 'cinturón'. Este trío está dispuesto en fila y va de Este a Oeste en la dirección que señala la 'espada'.

La Naturaleza es intuitiva si estas desesperado

Si necesitamos recorrer isla y orientarnos para no andar lo ya pisado, es bueno ir fijándose en tres pequeños detalles si estás en el hemisferio norte:

· Una pista la da el musgo. Suelen crecer en las zonas más húmedas y más a la sombra, distintivo de la cara norte.

· Ocurre lo mismo con las montañas. Las laderas orientadas al norte, reciben menos sol por lo que suelen ser más húmedas, de tonalidades más frías y retienen la nieve por más tiempo.

· Los anillos del tronco de los árboles suelen estar más desarrollados del lado que reciben más sol, es decir, del sur.