Testimonio sepsis

Una sepsis cambió la vida de Marianne: "En 24 horas acabé en la UCI y ahora arrastro secuelas"

Marianne Haverkamp sufrió un grave shock séptico hace cuatro años. Cedida
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Marianne Haverkamp (40 años) siempre se había considerado una mujer fuerte, casi invencible. Tenía su propia empresa, trabajaba más de 60 horas semanales y nunca renunciaba a su rutina de running de entre 7 y 15 kilómetros cada día. Pero el 16 de julio de 2021 descubrió, de golpe, que su vida podía quebrarse.

Ese día había transcurrido como otro cualquiera en plena temporada alta en Menorca. A las cuatro de la madrugada se despertó con una sensación extraña en el abdomen. Pensó que quizá era hambre y se comió un plátano, pero a los pocos minutos empezó a vomitar y a tener diarrea. Tres horas después, a las siete de la mañana, apenas podía arrastrarse los dos metros que separaban su cama del baño.

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Llamaron a una ambulancia, y no fue hasta las once y media de la mañana que acudió una médica de un centro de salud. "Sin hacerme ninguna prueba, me dijeron que era COVID, que debía aislarme y que una ambulancia especializada vendría a buscarme", recuerda. Sin embargo, al tratarse de un único vehículo para todas la isla, las horas pasaban y Marianne se encontraba cada vez peor. "Creía que me moría, estaba al límite". Cuando la ambulancia llegó, ya había perdido el conocimiento.

En el hospital, su tensión estaba bajo mínimos y su frecuencia cardíaca no dejaba de subir. En menos de 24 horas ingresó en la UCI. Se trataba de un shock séptico con fallo multiorgánico de origen desconocido. "Fue todo muy rápido y no encontraron la bacteria".

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La sepsis en España: más muertes que por algunos cánceres

La sepsis es una emergencia médica que ocurre cuando una infección desencadena una respuesta inmune descontrolada que daña órganos y tejidos. En España, entre 50.000 y 75.000 personas sufren sepsis cada año, de las cuales 17.000 mueren a causa de sus consecuencias: más que por cáncer de mama, de colon o de páncreas, y 14 veces más que las víctimas de accidentes de tráfico.

Se estima que entre un 6 % y un 10 % de los pacientes atendidos en urgencias por infecciones sufren realmente sepsis, aunque existe un infradiagnóstico de hasta el 30 % de los casos.

Marianne pasó tres días en la UCI. El jefe de la unidad le confesó que había sobrevivido, en parte, gracias a su excelente forma física. La recuperación fue la parte más dura: "Salía a la calle y sentía que no era capaz ni de ir de banco en banco porque me faltaban las fuerzas. Tampoco podía escribir: intentaba poner una palabra y salían otras". Desde entonces trabaja en casa porque estar en una oficina le hace imposible concentrarse.

Hoy, casi cuatro años después, sigue conviviendo con secuelas. Tiene dolor intenso en el brazo derecho y alteraciones cognitivas que le impiden, por ejemplo, ir al cine o conducir sola tramos largos.

El síndrome post-sepsis, una realidad invisible

En otros países europeos, las secuelas de esta infección se reconocen bajo el nombre de síndrome post-sepsis. En España, no están reconocidas. Marianne, que coordina la plataforma InfoSepsis, lo ha vivido en su propia piel: "Llegas a casa con una caja de antibióticos sin ninguna revisión programada. Cuando vuelves al médico por tus problemas cognitivos, te dicen que no tienes nada y acaban mandandote al psicólogo con una receta de antidepresivos".

Lo cierto es que entre un 30 % y un 50 % de los supervivientes de sepsis presentan secuelas físicas, cognitivas o emocionales que pueden cambiar por completo su vida. Pero al no estar reconocidas, se quedan sin apoyos ni rehabilitación.

La necesidad de un cambio

Esta semana, Marianne —que también forma parte de la European Sepsis Alliance— se ha reunido, junto a otros representantes, con la ministra de Sanidad, Mónica García. El objetivo de la cita: reclamar un plan nacional para la sepsis, similar a la que ya existe para el ictus.

Entre las prioridades planteadas están reforzar la detección precoz mediante la visibilización de las señales de alarma para que los pacientes acudan al hospital a tiempo, aumentar la formación específica de los profesionales sanitarios y reconocer y tratar las secuelas que deja esta enfermedad. Según explica Marianne, la respuesta del Ministerio ha sido positiva y receptiva

"Es fundamental que la población sepa reconocer los síntomas de alarma para que acuda al hospital, ya que el 80 % de los casos comienzan en casa", señala. Los síntomas más característicos son fiebre alta, dolor o malestar extremo, frecuencia cardíaca rápida, sensación de desorientación, sudoración o manchas en la piel. "La sensación que muchos pacientes recordamos es que sientes que te estás muriendo".

Un problema de salud pública poco conocido

Con motivo del Día Mundial de la Sepsis, que se celebra cada 13 de septiembre, la Fundación Código Sepsis y la Fundacion DFA han presentado un estudio que evidencia la magnitud del problema: el 52 % de la población no sabe qué es la sepsis, el 65 % desconoce las muertes que provoca y solo uno de cada cuatro identifica sus síntomas clave.

"Yo estaba sana y en 24 horas acabé en la UCI. Ahora arrastro secuelas. La sepsis le puede ocurrir a cualquiera", recuerda Marianne. Por eso, insiste en que la importancia de la concienciación social y la acción política.