Sandra Bermejo: el Juzgado de Instrucción número 3 de Gijón abre nuevas líneas de investigación

"Creo que hay gente que sabe lo que ha pasado y que no están contándolo". Son palabras de Juan Manuel Medina, abogado de la familia de Sandra Bermejo, la psicóloga madrileña desaparecida en Cabo de Peñas, en el Principado de Asturias, el pasado 8 de noviembre. La búsqueda de la joven de 32 años sigue sin dar resultados, mientras su familia trata de asimilar que, seguramente, le haya pasado "algo malo". Siguen con la agonía de no saber qué le pudo ocurrir, ya que el cuerpo que fue hallado recientemente no corresponde a ella. Mantienen que el suicidio es la posibilidad menos plausible.

La Policía ha mantenido como principal línea de investigación desde el inicio la "desaparición voluntaria", es decir, que la joven se quitó la vida lanzándose al mar. Desde el Juzgado de Instrucción número 3 de Gijón, que se encarga del caso, no se descarta ninguna línea de investigación. Se han acordado nuevas medidas de investigación ante la posibilidad de que la desaparición no sea voluntaria,. Especial importancia cobre el avistamiento de dos coches aparcados junto al de la psicóloga por lo que se ha dado mandamientos para obtener el duplicado de la tarjeta SIM del móvil de Sandra. Pero todas las hipótesis siguen abiertas. El juzgado tiene plena confianza en la investigación policial.

"Presunta comisión de un delito contra la vida o la integridad física de Sandra Bermejo"

El juzgado señala que ha pasado demasiado tiempo sin novedades en el caso e indica "que se han abierto diligencias por la presunta comisión de un delito contra la vida o la integridad física de Sandra Bermejo". Desde el primer momento el juez lo ha calificado como una "desaparición de alto riesgo". Según explica Medina, la familia ha presentado un escrito en el que solicitan la declaración del grupo de pescadores que vieron los dos coches aparcados junto al de la psicóloga, algo que les sorprendió, al ser totalmente "inusual" que hubiera gente por allí a esas horas.

Medina asegura que los pescadores están identificados y mantienen contacto con la familia de Sandra. El abogado facilita este martes los datos de estos trabajadores al juzgado para facilitar la tarea y que se les pueda tomar declaración. "Hemos hecho esa labor de indagación, como solemos hacer en estos casos en SOS Desaparecidos. Esperamos que el juzgado de traslado a la Policía y se proceda a tomar declaración. No van a poder aportar mucho, al no quedarse con las matrículas o los modelos de los coches, pero será una pincelada más de que hay cosas por hacer", precisa el letrado.

Según los pescadores, en el aparcamiento donde se halló el coche de Sandra observaron tres vehículos que estuvieron estacionados durante toda una noche. Era el de la psicóloga y otros dos. Estaban "juntos", cuando el "resto del aparcamiento estaba libre". Los testigos afirman que los coches estuvieron desde la tarde del 8 de noviembre -cuando desapareció la psicóloga- hasta poco antes del amanecer del día 9. Medina asegura que esta línea de investigación no se ha seguido lo suficiente: "Tenemos constatación de que muchas aristas, muchas cosas, se están pasando por alto. A lo mejor no son concluyentes y no llevan a nada, pero son de suficiente entidad para tener en cuenta".

Todas las posibilidades abiertas: desde la familia no sospechan de nadie en concreto

El pasado 23 de diciembre se encontraron unos restos humanos en el mismo punto del Cabo de Peñas donde desapareció Sandra, sin embargo, los análisis forenses han descartado que se trate de la joven psicóloga: "A falta de cotejo de ADN, de forma extraoficial, parece descartado que se trate de ella. Hay mucha gente que aparece que no está identificada y nadie la reclama. Lo que pasa es que aparecieron en el mismo punto donde las autoridades mantienen que Sandra se arrojó al mar, por lo que después de tanto tiempo, en un mar como el Cantábrico, si fueran los restos de ella no estarían ahí, habrían aparecido a más distancia", subraya Medina.

El entorno siempre ha descartado casi por completo la posibilidad del suicidio, al igual que la de un accidente, y han apuntado a una "desaparición involuntaria" que implique a terceras personas. Eso sí, por ahora no sospechan de ninguna persona cercana a la psicóloga: "Desde la familia no se habla de nadie en concreto. No había nada a nivel sentimental, hasta donde sabemos y conocemos, que haga pensar que pudiera implicar a una pareja o expareja".

A pesar de no obtener resultados, tanto el letrado como los familiares de Sandra mantienen abiertas todas las posibilidades. No quieren que se descarte nada sin ninguna prueba o indicio. SOS Desaparecidos, que ha divulgado una foto de una mujer en el Cabo de Peñas -para tratar de saber si era la psicóloga madrileña-, mantiene "acuerdos de colaboración" con numerosas entidades. Entre ellas, la Asociación Profesional de Detectives Privados en España (APDPE), que "de forma altruista" y siempre "dentro de lalegalidad, trabajan en líneas alternativas por detectar. "Se trata de poder dar algún tipo de lectura que no se haya dado hasta el momento", concluye Medina. No pierden la esperanza, pero piden recurrir a todos los medios disponibles para esclarecer los hechos.