Un entrenador, a prisión por una presunta agresión sexual a al menos cinco menores en Huelva

Un entrenador de fútbol infantil de Huelva está acusado de agredir sexualmente al menos cinco niñas, menores de edad, que él mismo entrenaba. Fueron los padres de una de las jóvenes quienes dieron la voz de alarma en una comisaría de la ciudad onubense el pasado domingo. Al día siguiente fue detenido en las instalaciones deportivas donde trabajaba, iniciándose así la investigación por parte de la Policia Nacional. El juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Huelva, tras conocer los hechos, ordenó el ingreso en prisión provisional el pasado jueves del entrenador que había abusado supuestamente de las cinco niñas menores de 16 años. Un hecho similar también ocurrió en Murcia, donde un entrenador de fútbol fue detenido a finales del diciembre pasado imputado por el mismo delito de agresión sexual contra menores.

El investigado ha pasado ya a disposición judicial según ha informado el Tribunal Superior de Justica de Andalucía (TSJA), donde está siendo investigado por un delito de agresión sexual y otros tres de agresión sexual y prevalimiento. Aunque la Policía Nacional, encargada de la investigación, no descarta que puedan existir más víctimas por lo que se le podrían imputar nuevos cargos.

El entrenador se valía, presuntamente, de su condición para agredir sexualmente a las menores

El detenido, un hombre de 62 años, es técnico de deportes en la Universidad de Huelva. Con más de 30 años de trayectoria ligado al mundo del fútbol. En las instalaciones deportivas de dicha universidad era donde llevaba a cabo los entrenamientos con las menores. Allí, se hacía valer de su posición de entrenador de fútbol base femenino para tener acceso a las jóvenes, produciéndose estos hechos desde 2017.

El acusado, obligaba a las víctimas a quitarse la ropa interior para poder darles "masajes", que eran fundamentales, y que sin ellos no podrían volver a jugar en el equipo. Así mismo, en entrenador supuestamente también les arrebataba la ropa interior y se las guardaba entre sus pertenencias personales. También bajo diversas excusas, el arrestado accedía a los vestuarios y duchas para observar a las jugadoras y les regalaba prendas de ropa buscando que se desvistieran en su presencia.

Para llevar a cabo las agresiones sexuales y poder estar a solas con las menores se valía de un almacén usado para guardar el material deportivo del equipo y se ofrecía a costearles el precio de la habitación de hotel en los distintos desplazamientos que realizaban si las menores compartían la misma habitación con él.

En un primer momento, tras conocerse la denuncia, se identificaron a cuatro víctimas, que se ha ampliado este viernes a cinco. La Policía Nacional sigue investigando los hechos y animan a cualquier otra persona que haya podido ser víctima del supuesto agresor a que presente una denuncia en comisaría.