Siete años de internamiento para el menor que participó en un atraco a un bingo en Tortosa: murió una mujer

El juzgado de menores de Tarragona ha acordado internar en régimen cerrado durante 7 años y 3 meses al menor acusado de participar en un atraco en un bingo de Tortosa, Tarragona, el pasado septiembre. Murió una trabajadora de un disparo en la cabeza.

Una vez supere el tiempo de internamiento, el menor vivirá un año de libertad vigilada con asistencia educativa, según la sentencia.

El menor --como responsable civil directo-- y sus progenitores --como responsables civiles solidarios-- deberán indemnizar a la madre de la fallecida con 108.690 euros, y a un cliente del bingo con 21.965 euros "por el menoscabo físico sufrido" y las secuelas ocasionadas. El hombre resultó herido en el atraco del pasado septiembre.

También tendrán que pagar al representante legal del establecimiento "la cantidad que se determine en ejecución de sentencia por los desperfectos ocasionados en el establecimiento".

Así fue el atraco mortal al bingo de Tortosa

El 19 de septiembre de 2022, sobre las 00.40 horas, el menor, acompañado de otras tres personas mayores de edad, "puestos de común acuerdo y guiados por el ánimo de obtener un beneficio patrimonial", se dirigieron al bingo, que se encontraba abierto al público.

En ese momento, el menor y dos de las personas mayores de edad, entraron en el establecimiento armados con pistolas y ocultando su rostro con un pasamontañas "para evitar su identificación". Mientras el tercer adulto hacía labores de vigilancia.

Una vez en el interior, se dirigieron al único cliente que quedaba en el establecimiento que ya estaba cerrado, le sustrajeron su teléfono móvil "para evitar que pidiera ayuda" y le dispararon en el abdomen.

Acto seguido, se dirigieron a la encargada del bingo, quien "colaboraba con el menor y los restantes autores del hecho" y, en un momento dado, le dispararon en la nuca, motivo por el que falleció horas después.

Momento antes del disparo, la encargada "había conseguido activar el botón de la alarma del establecimiento", y el cliente --que se encontraba herido--, consiguió desplazarse hasta una de las dependencias del local y desde un teléfono activó el 112, hecho que hizo que los atracadores abandonaran el local.

"El menor y las personas mayores de edad habían planificado con anterioridad la comisión del presente hecho delictivo", añade la Sala.