Investigan a la novia de Ana Julia Quezada por las amenazas a la madre de Gabriel Cruz: capaz de usar a su pareja para atentar contra Patricia Ramírez
El magistrado ha ordenado también citar en calidad de investigada a la novia de Quezada
Prorrogada por seis meses la investigación a funcionarios de la prisión de Brieva por tener sexo con Ana Julia Quezada
Ana Julia Quezada, condenada por el asesinato del niño Gabriel Cruz en 2018, está citada a declarar en el juzgado de Almería el próximo 23 de julio por las supuestas amenazas de muerte realizadas a la madre del pequeño. El magistrado ha ordenado también citar en calidad de investigada a la novia de Quezada.
La actual pareja de la asesina del pequeño Gabriel ya había declarado como testigo en la investigación abierta a varios trabajadores del penal por obtener sexo con Quezada a cambio de favores. Ahora, será interrogada por la denuncia de amenazas.
Según afirma El Periódico, el juez citar a la pareja de Ana Julia a raíz de la declaración de otra testigo que compartió cárcel con Quezada, donde aseguró escuchar en repetidas ocasiones cómo amenazaba con matar a Patricia Ramírez. Ante la imposibilidad de llevar a cabo su intención por no poder salir de la cárcel, esta sería capaz de usar a su pareja para atentar contra la madre de Gabriel, por “está loca por ella”.
Patricia recibió amenazadas directas desde la prisión de Brieva
El pasado 7 de mayo, Ramírez denunció públicamente en Almería haber recibido amenazas directas desde la prisión de Brieva (Ávila), donde Quezada cumple condena por asesinar al niño de ocho años.
Según afirmó entonces, personas tanto del interior como del exterior del centro penitenciario le habían trasladado que Quezada expresó su intención de matarla, y que estas manifestaciones habrían tenido lugar ante otras internas.
Ramírez aseguró haber trasladado esta información a distintas autoridades penitenciarias, judiciales y políticas sin obtener respuesta, y lamentó la “total falta de protección institucional” frente a lo que calificó como una “revictimización constante”.