Okupas

'Vamos a ver' consigue el compromiso de una okupa de abandonar la vivienda de Pedro: "Me voy a marchar. No sabía que la había comprado”

'Vamos a ver' consigue el compromiso de una okupa de abandonar la vivienda de Pedro: "“Me voy a marchar. No sabía que la había comprado.”
Pedro es el dueño del piso okupado y Marta la okupa de la casa. Telecinco.es
Compartir

Pedro decidió comprarse una casa en el centro de Vigo con todos sus ahorros, a la que ha podido acceder hoy por primera vez. Cuando decidió comprarla, le informaron de que anteriormente había estado okupada, pero que en ese momento no lo estaba, y por eso estaba un poco más barata. La familia que vive en ella se negaba a salir y el propietario no podía disfrutar de ella. Pero, tras la conexión con 'Vamos a ver', la okupa accedió a marcharse.

'Vamos a ver' se ha desplazado hasta Vigo para hablar con Pedro, el dueño de la casa okupada, y con la empresa de desocupación que ha contratado para recuperarla. Gracias a la mediación de esta empresa, Pedro ha podido entrar por primera vez en su casa: “Compré esta vivienda hace 5 meses y yo pensaba que estaba libre. En el momento de intentar entrar en ella, me di cuenta de que había alguien dentro.”

PUEDE INTERESARTE

Hoy, después de 5 meses, es la primera vez que puede entrar en su casa y nos cuenta sus impresiones: “La vivienda, evidentemente, está destrozada, pero todavía no me ha dado tiempo a verla. Supongo que, además del precio de la vivienda, tendré que hacer una reforma para poder entrar a vivir.”

Marta, okupa de la casa: "No sabía nada"

Además, ha podido hablar con Marta, la okupa, que explica que no entró cuando Pedro compró la vivienda, sino que lleva mucho tiempo allí: “Llevo 5 años en esta casa. Me la alquiló un señor porque yo estaba buscando vivienda, y siempre se echan para atrás al ver que soy gitana; nadie me alquilaba, y este señor sí. Pero la casa estaba con sangre por todas las paredes, cristales rotos, persianas rotas, humedad…”

PUEDE INTERESARTE

Ella asegura no saber nada de que estaba ocupando ilegalmente y que quien se la alquiló no era el dueño: “Yo no sabía nada; ahora me estoy enterando.”

Ante esto, Alfonso Egea le pregunta si, ahora que lo sabe, piensa marcharse: “Sí, me voy a marchar. Pero me estoy quedando helada al escuchar a este chico, porque no sabía que la había comprado.”

Tras la conexión, Alfonso Egea informó que Marta se iba a ir a una pensión, por lo que Pedro podía disponer de su casa.