La muerte del turista catalán de 37 años en Bali: fue advertido de no bucear más de cinco metros, pero continuó la inmersión por su cuenta
El turista español que murió el domingo en Bali habría hecho caso omiso a las indicaciones de no sumergirse a más de cinco metros
El turista catalán perdió la vida mientras realizaba pesca submarina
A pesar de las repetidas recomendaciones de no descender más allá de cinco metros de profundidad, el turista catalán de 37 años que falleció el domingo en el norte de Bali continuó buceando solo durante una excursión de pesca submarina. Su cuerpo fue hallado más tarde a 20 metros bajo el agua.
Así lo informan medios locales como 'The Bali Times'. Nuevos detalles sobre el suceso, ocurrido en aguas de Tangkad Menaum, frente a la localidad de Pemuteran (distrito de Gerokgak), permiten reconstruir las circunstancias de una jornada que había comenzado como una salida informal junto a tres residentes locales —Ketut Diatmika (41), Putu Oka Wirawan (29) y Komang Desmen Wirawan— y terminó en tragedia.
Según confirmó la portavoz de la Policía de Buleleng, Iptu Yohana Rosalin Díaz, durante la excursión se le advirtió al turista español de que no se sumergiera a tanta profundidad debido a las condiciones del entorno y al tipo de equipo que llevaba. Sin embargo, optó por continuar buceando en solitario y se le perdió de vista.
Sus compañeros realizaron varias inspecciones desde la embarcación y se sumergieron en repetidas ocasiones intentando localizarlo, sin resultados. Más tarde, un equipo de buzos especializados halló el cuerpo sin vida. La causa exacta del fallecimiento aún no ha sido determinada, aunque las primeras hipótesis apuntan a que pudo desmayarse por falta de oxígeno y que falleció ahogado.
Gestiones diplomáticas en curso
Mientras continúa la investigación por parte de las autoridades indonesias, desde España se han activado los canales consulares correspondientes. La Delegación del Gobierno en Cataluña ha precisado que está en contacto con la Dirección General de Emergencias Consulares para conocer la situación con detalle. Asimismo, la cónsul en Yakarta se está desplazando al lugar de los hechos para llevar a cabo la identificación formal del cuerpo y coordinar su repatriación, en consonancia con la legislación indonesia.
Por su parte, la Embajada de España en Yakarta ha confirmado que sigue de cerca lo sucedido y mantiene comunicación directa con los familiares del fallecido, a quienes está prestando la asistencia necesaria.
Un entorno exigente y decisiones bajo análisis
Este nuevo caso se enmarca en un contexto más amplio que preocupa a las autoridades locales: el incremento de accidentes durante actividades recreativas en el mar, especialmente entre turistas extranjeros. Aunque la pesca submarina es una práctica habitual entre residentes de la zona, los riesgos aumentan cuando no se cuenta con la preparación necesaria, el equipo adecuado o el conocimiento del entorno.
En este caso, el hecho de haberse unido a una excursión no profesional y no seguir las advertencias de quienes conocían la zona podría haber contribuido a un desenlace fatal. Las autoridades locales insisten en la necesidad de actuar con prudencia y respetar siempre las recomendaciones de seguridad, especialmente en entornos naturales donde las condiciones pueden cambiar con rapidez.