Lujo, fe y miedo: un equipo de ‘El tiempo justo’ se infiltra en la secta de El Palmar de Troya
Una investigación en exclusiva muestra cómo vive la comunidad palmariana, marcada por el secretismo, el control y una riqueza que contrasta con la austeridad que predican
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Un equipo de investigación de ‘El tiempo justo’ ha conseguido infiltrarse en la Iglesia Cristiana Palmariana de los Carmelitas de la Santa Faz, en El Palmar de Troya (Sevilla). Coincidiendo con una jornada de puertas abiertas, las cámaras del programa accedieron al interior del recinto y documentaron un espectáculo religioso de lujo, devoción y normas férreas.
La reportera María Hernando, desplazada al lugar, narró en directo la experiencia de acceder a uno de los templos más herméticos del país: “Entrar aquí no es fácil; todo está vigilado y cada paso controlado”, explicaba frente a la imponente basílica dorada.
Dentro, la imagen sorprende: tronos valorados en más de 80.000 euros, paredes forradas de oro, pasos de Semana Santa y una figura de Francisco Franco entre sus santos venerados. El patrimonio, según estimaciones, podría superar los dos millones de euros.
Un protocolo implacable
Para acceder al recinto, los visitantes deben cumplir un estricto código de vestimenta. “Tuve que comprar un pañuelo en un bazar para poder entrar”, contaba la reportera, a quien inicialmente se le negó la entrada por llevar falda vaquera.
Una vez dentro, las normas son claras: fieles separados por sexos, mujeres con velo, hombres de camisa abrochada y silencio absoluto.
El equipo del programa fue seguido por dos miembros de la congregación cuando empezaron a hacer preguntas. “Nos perseguían literalmente hasta que nos echaron, porque dijeron que la televisión era el mal”, relata la periodista.
Adoctrinamiento desde la infancia
Entre los asistentes, predominaban extranjeros del norte de Europa y Latinoamérica. Apenas un pequeño grupo de españoles vive dentro del recinto. Muchos, como un extremeño entrevistado por el equipo, reconocen haber entregado su patrimonio a la Iglesia “de forma voluntaria”.
La reportera destaca la presencia de numerosos niños: “Un niño de siete años me reprendió por estar en el lado de los hombres; el adoctrinamiento empieza desde pequeños”.
El Palmar de Troya continúa siendo, décadas después de su fundación, una de las sectas más misteriosas y ricas de Europa. ‘El tiempo justo’ ha logrado mostrar, por primera vez en años, la cara visible de una fe que combina opulencia, aislamiento y obediencia absoluta.
