El alcalde de Negreira, Jorge Jesús Tuñas Caamaño, señaló a Efe que el incendio iniciado en la madrugada de ayer en su municipio está "casi apagado" después de quemar unas 519 hectáreas, principalmente de matorrales.
Se trata del mayor incendio forestal registrado este verano en Galicia, donde desde principios de agosto han ardido unas 2.200 hectáreas en unos quinientos incendios, muchos de ellos de pequeña magnitud.
Según la Consellería de Medio Rural, los dos incendios registrados en Porto do Son, en la costa coruñesa, en las parroquias de Ribasieira y Goiáns, respectivamente, están ya extinguidos.
La superficie quemada es de unas 40 hectáreas de superficie arbolada en esas dos zonas, según las conclusiones todavía provisionales.
Respecto al registrado en la parroquia de Baredo, en el municipio pontevedrés de Baiona, la Xunta señala que todavía está activo y que las llamas han quemado ya unas 45 hectáreas.
Tres helicópteros, un avión y otros medios terrestres, incluidos equipos de expertos, han sido movilizados para las labores de extinción del fuego, que en algunos casos ha estado cercano a zonas habitadas.
La Consellería de Medio Rural de la Xunta ha puesto además el nivel de alerta en distritos de la provincia de A Coruña de Barbanza, Fisterra y de la costa da Morte ante el peligro de incendios, lo que supone un paso previo para redoblar la presencia en la zona.
La Xunta justifica esa medida por el aumento de la intensidad del viento en esas zonas del litoral gallego y por la proliferación de fuegos en las últimas horas debido a "un aumento de la actividad incendiaria delictiva".
Recuerda que dos agentes de la lucha contra incendios fallecieron en la noche del jueves al viernes cuando trataban de apagar un fuego en el municipio pontevedrés de Fornelos de Montes y reitera el llamamiento a la colaboración ciudadana para localizar a los autores de los fuegos que proliferan en verano en los montes de Galicia.